Francia experimenta este verano un abono para viajes ilimitados en tren sólo para jóvenes
Lo podrán disfrutar todos aquellos franceses menores de 27 años durante los meses de julio y agosto por 49 euros al mes.
Francia va a experimentar este verano un abono de 49 euros al mes en julio y agosto al que se podrán acoger los jóvenes de menos de 27 años para viajar de forma ilimitada en tren, pero con la exclusión de los de alta velocidad (TGV).
El ministro de Transportes, Patrice Vergriete, justificó este viernes que la "experimentación" se limite en el tiempo y únicamente a los jóvenes con el argumento de evitar una saturación de los trenes como la que se produjo en Alemania.
"Era el riesgo si empezábamos muy pronto y muy fuerte", señaló Vergriete en una entrevista a la emisora Sud Radio, en la que precisó que el Pass Rail debería estar disponible para ser reservado a partir de junio y que sólo se podrá utilizar con la compañía estatal de ferrocarriles SNCF.
Servirá para viajar en los trenes de largo recorrido convencionales (Inercités), en los regionales (TER) y en los de noche.
No se podrá utilizar ni en los TGV ni en los cercanías de la región de París (Ile de France), ya que en este último caso había un problema técnico puesto que sus billetes sirven también para el metro de la capital.
El ministro francés, que ayer se reunió en Bruselas con su homólogo alemán, Volker Wissing, indicó que los dos países van a trabajar en la posibilidad de un abono común que permita viajar de forma ilimitada en Francia y en Alemania.
Por otro lado, Vergriete señaló que Francia no sólo se opone a la circulación de megacamiones en su red viaria, sino igualmente a la directiva europea adoptada por el Parlamento Europeo el pasado 12 de marzo que sienta las bases para el tráfico internacional de esos vehículos articulados de más de 40 toneladas.
Las razones que dio es que Francia tiene un programa de inversión de 4.000 millones de euros de aquí a 2031 para desarrollar el transporte de mercancías por ferrocarril e impulsar los megacamiones sería una contradicción y también que "nuestras infraestructuras no están ahora adaptadas".
A ese respecto, hizo notar que su homólogo alemán le explicó que en su país tendrían que reforzar decenas de puentes.
