Unos 200.000 israelíes han pedido licencias de armas tras el ataque de Hamás

El Gobierno ha relajado los criterios y el tiempo para obtener el permiso mientras los campos de tiro se llenan de los que temen por su seguridad.

EFRAT (CISJORDANIA), 25/10/2023.- Un hombre acompañado por su hija acude a Caliber 3, una academia antiterrorista que da entrenamiento tanto a fuerzas de seguridad como a civiles. Desde el ataque de Hamas el pasado 7 de octubre, se ha incrementado el numero de personas que acuden a estos centros a adquirir un arma y aprender su manejo. En plena guerra con el grupo islamista Hamás, Israel impulsa a sus civiles a adquirir licencias de armas, una estrategia que ha encontrado eco en la población israelí, aún traumatizada por la masacre del 7 de octubre, y que está llenando las arcas de las escuelas de entrenamiento bélico para civiles. EFE/Manuel Bruque
Un hombre acompañado por su hija acude a Caliber 3, una academia antiterrorista que da entrenamiento tanto a fuerzas de seguridad como a civiles. 
Manuel Bruque

"Ahora no es el momento". Es la frase que resuena en todas partes de Israel para indicar que los civiles deben estar con sus armas cargadas y listos para defenderse. Mientras el ejército hebreo, armado hasta los dientes, combate cuerpo a cuerpo en Gaza contra Hamás, los vecinos se agolpan en las tiendas para comprar su primera pistola o rifle automático. Las arcas de las escuelas de entrenamiento bélico para civiles de Tel Aviv están llenas desde el primer ataque del grupo terrorista palestino del pasado 7 de octubre. Unas 200.000 licencias de armas han sido solicitadas desde entonces para combatir la sensación de inseguridad que inunda las calles del Estado judío.

El Gobierno ha sido el primero en motivar la compra de estos artefactos. La flexibilización de los requisitos y la inclusión de grupos que antes se consideraban "no aptos" ahora pueden acceder a ella y sumarse a los más de 170.00 personas que ya cuenta con el documento.

Cuando Hamás lanzó su ofensiva -matando a 1.400 personas y secuestrando a casi 250-, los grupos de autodefensa civiles también encararon el conflicto. El Ministerio de Seguridad Nacional decidió blindar los barrios y crear 600 escuadrones equipados con 10.000 rifles nuevos. El propio titular de la cartera, Itamar Ben Gvir -de extrema derecha y defensor de la propiedad privada de armas-, ha recorrido el país entregando las adquisiciones, principalmente a colonos en las regiones fronterizas con Gaza.

Vecinos y madres

El Ejecutivo lanzó dos días después del ataque una "orden de emergencia" para que el mayor número posible de personas pueda armarse, relajó los criterios de elegibilidad y redujo la espera de tres meses para la aprobación. Una entrevista telefónica reemplaza a la antigua cita presencial de los solicitantes que en sólo una semana ya pueden contar con el documento. Veteranos, paramédicos voluntarios e inmigrantes recién llegados ya pueden obtener el permiso -previa verificación de antecedentes policiales- después de estar vetados o de tener que esperar hasta tres años antes de pedirlo.

Los hebreos consumen su propio producto. El armamento bélico de fabricación israelí es el favorito. Se ha convertido en un "accesorio" más. Las armerías agotan su inventario. De hecho, entre los vecinos se ha difundido la petición de que porten sus artefactos en las sinagogas. Patrullas vecinales y hasta madres solteras se arman para responder en caso de una incursión terrestre de Hamás.

La Policía ya había advertido en enero a los residentes que se armen. "Esos ciudadanos han evitado incluso daños a civiles y a las fuerzas de seguridad en más de una ocasión", destacaba un comunicado policial a principios del año, cuyas palabras se repiten diez meses después en plena guerra.

La facilidad para acceder a un arma de fuego, donde la mayoría puede manejarla -dado que el servicio militar es obligatorio para hombres y mujeres- también ha alertado a la comunidad con miedo a que sucedan crímenes más cerca de casa que en los campos de batalla. El temor es que las hostilidades migren a las calles al interior del país. "Es importante que hagamos todo lo posible para garantizar que las armas no acaben en las manos equivocadas", pidió el Foro Michal Sela, una ONG dedicada a la prevención de la violencia doméstica en Israel, en X. Las mujeres que han sido víctimas de agresiones intrafamiliares temen por su vida. Al igual que los reacios a tener armas, que rechazan que personas con trastornos psicológicos consigan hacerse con una.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión