Los sospechosos de envenenar a los Skripal dicen ser solo turistas

Petrov y Boshírov siguen el consejo de Putin y aparecen en una televisión para negar que pertenezcan a la Inteligencia rusa.

Alexánder Petrov y Ruslán Boshírov son los dos sospechosos
Los sospechosos de envenenar a los Skripal dicen ser solo turistas
Efe

Menos de un día desde que el presidente, Vladímir Putin, les conminara a hacerlo han tardado en dar explicaciones públicamente Alexánder Petrov y Ruslán Boshírov, a quienes Londres acusa de haber envenenado con el arma química 'Novichok' al exagente Serguéi Skripal y a su hija Julia. Ofrecieron una entrevista a la televisión multilingüe Russia Today (RT).

Petrov y Boshírov afirmaron ser los dos hombres que la Fiscalía británica y Scotland Yard señalan como los sospechosos del ataque. Dijeron también que son las personas que aparecen en las fotografías distribuidas por las autoridades de Reino Unido. Pero negaron pertenecer al GRU, la inteligencia militar rusa, y menos aún haber atentado contra la vida de nadie.

A la pregunta sobre si llevaron consigo 'Novichok', ambos lo negaron contundentemente. Aseguraron que tampoco transportaron ningún frasco de perfume Nina Ricci, en donde, según la Policía británica, habían depositado el veneno para camuflarlo ante una posible comprobación en el aeropuerto.

Confirmaron que todos sus movimientos mientras estuvieron en Reino Unido se produjeron con arreglo al orden cronológico y los emplazamientos establecidos por Scotland Yard. "Llegamos a Londres el 2 de marzo y fuimos primero a la estación para ver el horario de trenes a Salisbury", relató Petrov. El viaje lo hicieron al día siguiente.

La "famosa" catedral

Sobre la razón del desplazamiento a esta ciudad inglesa, Boshírov manifestó que "es turística. Allí se encuentra una catedral famosa por su aguja de 123 metros y su reloj". Pero solo estuvieron algo más de un hora y no fueron a ver el templo. En Londres creen que fue una incursión de reconocimiento preparatoria. Pero, según Petrov y Boshírov, había nevado y la localidad estaba "intransitable y los transportes colapsados". "Nos calamos y decidimos regresar a la estación, en donde estuvimos 40 minutos en el café antes de tomar el primer tren hacia Londres", dijo Petrov.

El día 4 volvieron a Salisbury y, según Boshírov, vieron por fin la catedral. Petrov explicó después que "hacia la hora de comer comenzó a diluviar aguanieve y tomamos la decisión de irnos también antes de lo previsto". Interrogados sobre si se acercaron a la casa de los Skripal, Boshírov explicó que "no sé dónde estaba su casa, no sé si casualmente pasamos cerca o no. Hasta que empezó esta pesadilla, no había oído ese apellido y no sabía nada sobre ellos". Aquel 4 de marzo, Skripal y su hija fueron hallados inconscientes en Salisbury, recostados en un banco de la calle.

Los dos sospechosos negaron tener nada que ver con lo sucedido al exagente ruso, a su hija y, meses después, a Dawn Sturgess, la única fallecida en Salisbury por la poderosa sustancia tóxica. Defendieron ser empresarios que comercializan preparados farmacéuticos para gimnasios, para "la industria del fitness", aunque el viaje a Inglaterra no fue de trabajo, sino para "desconectar". No quisieron precisar mucho cuál son sus actividades. "Si ahora descubrimos detalles sobre nuestro negocio, saldrán perjudicadas las personas que trabajan con nosotros", subrayó Boshírov. Tampoco quisieron hablar de sus familias y ni siquiera mostrar sus pasaportes.

Dijeron "necesitar ayuda". Boshírov señaló que "no podemos salir a la calle, tenemos miedo, tememos por nuestras vidas y estamos preocupados por nuestros familiares y las personas que nos conocen". "Las acusaciones de Londres han puesto nuestras vidas de patas arriba. Todo ha sido una fatal coincidencia", añadió. Esperan una disculpa desde Londres.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión