Reino Unido

Cameron vuelve de vacaciones ante la escalada en Siria

Las presiones de los partidos para convocar al Parlamento ante el supuesto ataque químico del régimen de Al ASad ha forzado su retorno desde Cornualles.

El primer ministros británico David Cameron
Cameron promete un referéndum sobre la permanencia del Reino Unido en la UE
EFE

El primer ministro británico, David Cameron, se reincorpora este martes a su residencia de Downing Street de sus vacaciones entre fuertes presiones de todos los partidos para convocar al Parlamento por la crisis de Siria antes de que concluya el receso estival.


Cameron se ha visto forzado a adelantar su vuelta a Londres desde Cornualles (suroeste del país), donde veraneaba con su familia, para coordinar la respuesta británica ante el supuesto ataque químico cometido el pasado día 21 por el régimen de Bachar al Asad, que el gobierno sirio ha negado, en la periferia de Damasco.


Se espera que Cameron decida este martes si convocará al Parlamento antes del próximo lunes, fecha en la que concluye el actual receso, entre las exigencias de diputados de todos los partidos que quieren que el 'premier' les consulte antes de adoptar cualquier decisión que implique una intervención militar del Reino Unido en Siria.


Está previsto que el líder 'tory' presida este miércoles una reunión del Consejo Nacional de Seguridad, al que acudirán ministros, responsables militares y de inteligencia, para analizar cuáles son las posibles opciones que baraja Londres ante esta crisis, según un portavoz oficial.


Tanto el opositor Partido Laborista como diputados conservadores han insistido en que el Gobierno debe explicar ante el Parlamento sus objetivos y fundamentos legales antes de tomar decisiones militares, si bien Cameron no tiene, en principio, la obligación legal de hacerlo, según indica este martes la BBC.


El viceprimer ministro, el liberaldemócrata Nick Clegg, ha cancelado una visita prevista a Afganistán ante la gravedad de la situación en Siria.


Durante el pasado fin de semana y este lunes -jornada festiva en el Reino Unido-, Cameron ha hablado con varios líderes políticos de otros países, entre ellos el presidente de EEUU, Barack Obama y su homólogo francés, Francois Hollande.


El jefe del Ejecutivo británico también ha hablado por teléfono con el presidente ruso, Vladimir Putin, en una charla en la que éste último consideró que no hay evidencias de que se haya cometido un ataque químico en Siria ni tampoco de que existan pruebas que apunten a un responsable, según un portavoz del Gobierno de Londres.


El ministro británico de Asuntos Exteriores, William Hague, dijo este lunes que Londres estudia sus opciones ante el conflicto y admitió que es posible una intervención ante la crisis aún sin contar con el apoyo unánime de la ONU, que ayer envió a un equipo de inspectores a visitar la zona afectada por el supuesto ataque químico.