Bachimala: a la búsqueda de la excelencia en Jaca

Bachimala apuesta por recetario tradicional, toques de cocina moderna y precios ajustados.

Carlos Prol y Laura Pérez, junto a la vitrina de la barra del Bachimala.
Carlos Trol y Laura Pérez, junto a la vitrina de la barra del Bachimala.

La experiencia de un bar de referencia en Jaca como es Marboré, se ha trasladado a la calle de Zocotín, cerca de la catedral, de la mano de un nuevo proyecto hostelero que han impulsado sus socios. Se llama Bachimala y lleva medio año abierto dinamizando este céntrico entorno y ayudando a crear una interesante zona de ambiente.

Su línea de trabajo es parecida a la de Marboré: cuidadas presentaciones sobre la base de productos de cercanía; recetario tradicional con algunos toques de cocina moderna y precios ajustados. Eso sí, aunque similares, no se repiten tapas y raciones.

Este local se divide en dos plantas. La de abajo está pensada para el picoteo más informal; para degustar, por ejemplo, algunas de sus croquetas: de carabineros ‘periquitos’ con salsa de ajetes y espárragos de Navarra o de rabo de toro con cebollita en su jugo.

Una de las presencias más novedosas es la de su vistosa vitrina, totalmente integrada en la barra. En ella, como si fuera el expositor de una joyería, se presentan en perfecto orden de revista las tapas, que todas las semanas cambian. Entran por la vista y resulta difícil no aventurarse a probar alguna.

El solomillo de buey a la parrilla con salsa de piquillos es una de las propuestas más clásicas, sobre todo para clientes que van a lo seguro.

Algo más hay que arriesgar al pedir el pan bao (pollo de corral especiado con emulsión de burrata y albahaca) o el calamar bravo (chusco de pan relleno de calamares con un toque de chile chipotle).

Ensaladilla, chopitos, cazón en adobo con espinacas o negroni oriental (calamares negros con alioli) para comer con palillos, son algunos entrantes de la carta, que invitan a sentarse tranquilamente en las mesas de la parte superior. Hay una para grupos que tiene unas magníficas vistas a la plaza de la catedral. Es la más demandada del local.

Entre las ensaladas, la más curiosa es la de changurro con rabanitos encurtidos y crujientes de pan de Sayón. En cuanto a los productos del mar, el pulpo asado se presenta sobre crema de mazorcas, y del atún hay dos versiones: tataki con guacamole y yuca crujiente y a la parrilla con ratatouille.

El abanico de carnes también es variado: taco de entrecot con mantequilla Marchand y parmentier de patatas amarillas; magret de pato en salsa de sangría de tinto Marboré o cochinillo a baja temperatura con chutney de pera limonera.

En fin, un recetario completo que se puede culminar con postres tan sugerentes como la panna cotta trufada con higos en almíbar o la tarta de queso con frutos del bosque.

Bachimala

Calle Bellido, 4. Jaca (Huesca).                    Teléfono: 974 352 322.      Horario: de 12.00 a 24.00. Descanso: abierto todos los días.Ir al suplemento de gastronomía

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