Alrededor de 400 amigos y clientes del Antiguo Bar La Jota pasaron a conmemorar con el personal del establecimiento el décimo aniversario, que se cumplió el pasado 26 de septiembre, una fecha muy dada a la celebración por la proximidad de las fiestas del Pilar.

Hubo un cortador de jamón trabajando a pleno rendimiento y se sirvieron tapas a discreción, todo acompañado por los vinos de Corona de Aragón, de la Bodega Grandes Vinos y Viñedos (D. O. Cariñena).

Antiguo Bar la Jota se estableció hace exactamente 10 años en la calle de Felisa Galé, en el corazón del barrio de La Jota, y cinco años después se trasladó a su actual ubicación, en el número 40 de la avenida de Cataluña, a un local mucho más amplio que le permitió ampliar su oferta gastronómica. Así, lo que empezó siendo un bar muy especializado en tapas y montaditos hechos al momento, ha terminado ofreciendo una propuesta muy consistente como restaurante para todo tipo de clientes. Tiene cinco menús degustación, cuyos precios oscilan entre los 15,50 y los 30 euros, aunque no ha abandonado su vocación original y sigue teniendo una amplia oferta de tapas y raciones para alegrar el cuerpo y el espíritu, una auténtica ‘picoterapia’, como reza el eslogan de su inquieto propietario, Ignacio Galiay, uno de los dinamizadores del Concurso de Tapas y Cazuelitas del Rabal. 

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