CAI

El comité de empresa de Caja Inmaculada rechaza la fusión 'virtual'

Los representantes de los trabajadores se oponen "enérgicamente" al SIP "por los peligros que representa": puerta abierta a la privatización, pérdida de empleo y de identidad

Oficina central de Caja Inmaculada en Zaragoza.
El comité de empresa de Caja Inmaculada rechaza la fusión 'virtual'
juan carlos arcos

Zaragoza. El comité intercentros de Caja Inmaculada rechazó ayer "enérgicamente" la inclusión de la caja de ahorros aragonesa en un SIP (Sistema Institucional de Protección). Los sindicatos con representación en el comité (UGT, CC. OO. y Asipa) aprobaron por unanimidad oponerse a este proceso "por los peligros que representa" para la CAI. En una nota de prensa elaborada tras la reunión que mantuvieron, el comité intercentros recuerda la multitudinaria asamblea celebrada el pasado día 2 de diciembre, en la que los trabajadores "rechazaron de forma unánime, entre otras cuestiones, la integración de la CAI en un SIP y exigieron responsabilidades a la dirección".

En la reunión de ayer, los representantes de los trabajadores explicaron las razones por las que rechazan esta fórmula de integración, conocida como fusión 'fría' o 'virtual', y las argumentaron en cuatro puntos: "La pérdida de la naturaleza jurídica y el carácter fundacional de Caja Inmaculada, al quedar supeditada su autonomía a las directrices que marque una sociedad anónima, constituida como entidad financiera de crédito". Porque "esta cesión deja la puerta abierta a una privatización de nuestra empresa -apuntan-, afectando de forma irreversible a la Obra Social y a los recursos que nuestra entidad ha puesto al servicio de la sociedad aragonesa". Porque "aprobar el SIP -continúa la nota- supondría trasladar a Madrid la sede social de la nueva sociedad anónima, localizando sus servicios centrales y centros de decisión fuera de nuestra comunidad, con la consiguiente pérdida de puestos de trabajo y de nuestra identidad".

Futuro

Por último, el comité intercentros recuerda que la CAI "tiene unos buenos ratios de solvencia y liquidez que nos permitirían afrontar con garantías y tranquilidad el futuro, sin las prisas e incertidumbres que esta modalidad de alianza supone". Por estas razones, y consecuentemente con lo expresado por la plantilla en la asamblea de la semana pasada, el comité de empresa de la CAI rechazó el planteamiento del SIP, "al margen de las personas que lo puedan dirigir".

En la nota de prensa remitida ayer no se menciona nada más. Sin embargo, hay que recordar que entre los acuerdos adoptados en la asamblea de la semana pasada se recogía la amenaza de convocar una huelga si el consejo de administración de la caja autorizaba la integración de la CAI en un SIP. La citada asamblea de trabajadores se celebró el día anterior a que se reuniera el consejo de la entidad aragonesa para adherirse o rechazar el acuerdo marco de creación del SIP. Este documento es un primer paso en el proceso. El consejo decidió posponer entonces su decisión y se dio un plazo de tiempo para madurar su postura. El consejo vuelve a reunirse el lunes, 14 de diciembre, para analizar la situación y tomar una decisión.