Tormentas
Cepyme Zaragoza reconoce que los daños en las empresas por la tormenta torrencial "son millonarios"
La organización empresarial está recopilando datos, pero todavía no tiene cifras concretas. Las zonas más afectadas son Cuarte y Cadrete, donde hay 14 polígonos industriales damnificados.
Una semana después de que una tromba histórica de agua y granizo descargara sobre Zaragoza y su área metropolitana comienzan a evaluarse los daños provocados por el siniestro en las pequeñas y medianas empresas. Lo está haciendo la Confederación de la Pequeña y Mediana Empresa de Zaragoza (Cepyme) y la Federación de Empresarios del Metal de Zaragoza (FEMZ) a través del portal habilitado en su página web para que los afectados puedan informar sobre los destrozos que la violenta tormenta provocó en sus instalaciones y maquinaria. "Todavía es pronto para cuantificar la totalidad de los daños, pero se puede asegurar que su magnitud es millonaria", señaló este viernes la presidenta de la organización empresarial que representa a la pequeña y mediana empresa de Zaragoza, María Jesús Lorente, que la próxima semana trasladará toda la información recopilada a la delegación del Gobierno de Aragón.
Los primeros datos disponibles evidencian que las zonas más afectada por las intensas lluvias del pasado 6 de julio han sido Cuarte y Cadrete. En estas dos localidades hay, según Cepyme, 14 polígonos industriales que han resultados damnificados, tanto que siete días en ellos todavía continúan las labores de limpieza.
Especialmente afectado por el lodo se encuentra también, como demuestran las informaciones trasladadas al portal de Cepyme y de FEMZ, el polígono de la Cartuja, donde continúan las labores de acondicionamiento. Precisamente en este polígono se encuentran uno de los centros productivos de BSH España y la fábrica de Taim Weser, donde el río de agua que entró en sus instalaciones les ha obligado a parar la producción hasta, al menos, finales del próximo mes de agosto.
Lorente detalló que los daños, que se centran sobre todo en las cubiertas, techos y maquinaria que ha quedado inoperativa por el agua, el barro y el lodo, son de tal magnitud que las empresas han tenido que recurrir al uso de maquinaria agrícola para poder retirar los escombros y el lodo acumulado en sus instalaciones.
El manufacturero y el de servicios son los sectores más afectados por las inundaciones que provocó la inesperada tromba, pero también hay cuantiosos destrozos en pequeñas y medianas empresas de sectores intermediarios de servicios, los dependientes de multinacionales, las obras, los talleres pequeños, los comercios que disponen de naves en polígonos industriales, así como en talleres de mecanización y reparación.
"Los principales problemas que encaran los afectados son las licencias para poner tejados de naves, las limpiezas de los viales y la situación de siniestro total, así como la incapacidad de deshacerse de depósitos de materiales inservibles que no está permitido depositar en puntos limpios", advirtió Lorente.
Agilidad en las ayudas
La presidenta de Cepyme celebró que «sea inminente» la declaración de zona catastrófica que pidió la organización empresarial a día siguiente de la tormenta. Pero Lorente cree que hay que ir más allá e instó a la Administración "a agilizar los procesos encaminados a conseguirla y que, de esta forma, la llegada de estos fondos vitales para la supervivencia de las pymes sea lo más próxima posible".
Y es que, como recordó Cepyme Zaragoza y FEMZ, una vez se tramite esta declaración, se pueden adoptar diferentes medidas como ayudas a particulares por daños en su vivienda, compensación a las administraciones por gastos inaplazables, ayudas a establecimientos y ayudas por daños en producciones agrícolas, ganaderas, forestales y de acuicultura marina, entre otras. También podrá contemplar medidas fiscales como la exención de la cuota del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) y reducción en el Impuesto sobre Actividades Económicas.
