automoción
Opel celebra 40 años de andadura con el reto creciente de su electrificación
La fábrica de Stellantis en Figueruelas, a la espera de la resolución del Perte y de la adjudicación de nuevos modelos.
La planta de Opel España en Figueruelas, del grupo Stellantis, celebrará hoy sus 40 años de andadura en plena transformación del sector, que se dirige a una electrificación generalizada que, en el caso de la marca del rayo, apunta a la fabricación solo de modelos propulsados con baterías desde 2028. La factoría zaragozana, de hecho, espera la resolución definitiva del Perte (Proyecto estratégico para la recuperación y transformación económica) del vehículo eléctrico y conectado, apoyo clave para su futuro a largo plazo.
El nuevo director de la fábrica aragonesa, José Luis Alonso (relevó en el puesto a Manuel Munárriz el día 1 de este mes), hará las veces de anfitrión de un evento al que acudirá la ministra de Industria, Reyes Maroto, y varios representantes del Gobierno de Aragón encabezados por su presidente, Javier Lambán, y los consejeros Marta Gastón (Economía) y Arturo Aliaga (Industria). Todos ellos conocerán los nuevos proyectos de la planta y visitarán tanto su taller de baterías como las instalaciones de montaje y acabado final.
Maroto podrá informar a los directivos de la factoría de Stellantis de la situación en la que se halla el Perte del vehículo eléctrico, un instrumento que la compañía considera clave para llevar adelante sus planes de futuro. La firma lidera una iniciativa denominada Tesis (Transformación hacia la electromovilidad y sostenibilidad industrial Stellantis), que planteaba inversiones por 223 millones de euros, si bien en la resolución provisional del Perte se le asignaban 42,4 millones. Tanto en la planta como entre el resto de los socios que participan en Tesis (el 88% pymes, un 43% de ellas aragonesas) se confía que la cantidad final sea mayor.
La llegada de ayudas del Perte será importante en los planes de Opel España relacionados con la producción que se registrará en Figueruelas en los próximos años. El Corsa, el más emblemático de cuanto coches han pasado por sus cadenas de montaje –«un icono», como lo definió la semana pasada el consejero delegado de Opel, Florian Huettl–, tendrá continuidad, no en vano mantiene índices importantes de ventas tanto en su versión térmica como en la eléctrica. Del utilitario que salió por primera vez de la factoría zaragozana un 5 de noviembre de 1982 no hay dudas, pero aún se espera el anuncio oficial de la salida de los dos SUV o ‘todocaminos’ que pasan hoy por la línea 1 de la planta –el Opel Crossland y el Citroën C3 Aircross– y de la llegada de otros dos modelos.
Todo apunta a la fabricación en Figueruelas de dos nuevos coches eléctricos, las versiones a baterías del Peugeot 208 y del Lancia Ypsilon. Stellantis ha confirmado ya la llegada de nuevos modelos enchufables, pero ha condicionado la decisión definitiva a los fondos que puedan llegar procedentes del Perte del vehículo eléctrico.
