Saica paraliza tres de sus cuatro plantas de cogeneración tras subir un 300% el coste del gas
El grupo papelero aragonés reduce la producción de papel un 10% y pide al Gobierno que actúe para evitar pérdidas de negocio y empleo.
El grupo papelero zaragozano Saica se ha visto obligado a parar la actividad de tres de sus cuatro plantas de cogeneración, las ubicadas en las instalaciones de El Burgo de Ebro, tras dispararse un 300% el coste del gas en España, lo que ha llevado a la compañía a reclamar al Gobierno la adopción de medidas paliativas que permitan a la industria no perder más competitividad en el escenario actual.
Según informaron ayer fuentes de la empresa familiar aragonesa, Saica mantiene paradas, por primera vez, dos de esas plantas desde el 1 de agosto y el pasado martes la dirección de la firma decidió paralizar una tercera. De esa manera solo se mantiene activa una más, la ubicada en las instalaciones zaragozanas del grupo, en el barrio del Picarral.
La paralización de estas plantas, fundamentales para la generación de la energía térmica que requieren los procesos productivos de las factorías de papel, se ha traducido en un recorte de la fabricación de papel de Saica en Aragón de un 10%, explicó a este diario Enrique de Yraolagoitia, director general del grupo.
«El sector papelero está afectado por esta pérdida de competitividad», incidió el directivo, que a continuación precisó que «en el caso de Saica, exportamos el 50% de nuestra producción en España» y que en estos momentos, «otros países como Francia, el Reino Unido o Alemania son más competitivos que nosotros, debido a los menores costes energéticos». Eso quiere decir, añadió, que «ese 50% está en riesgo y la pérdida de ventas conlleva pérdidas de producción y, al final, pérdida de empleo».
Yraolagoitia recordó que el decreto ley que aprobó el Ejecutivo de Pedro Sánchez en mayo pasado que establecía un tope al precio del gas incluía bonificaciones de las que se excluyó a las plantas de cogeneración, lo que ha afectado de modo muy perniciosos a industrias como la papelera o las cerámicas. Para frenar esos efectos negativos y la creciente pérdida de competitividad Saica pide tener la misma consideración que las empresas con ciclos combinados, como ha ocurrido en Portugal.
La cogeneración es una tecnología de alta eficiencia energética que ha sido muy útil durante años a empresas que necesitan grandes cantidades de calor para sus procesos productivos, lo que les ha llevado a instalar plantas propias que generan electricidad y calor a la vez, aprovechando así con mayor eficiencia el combustible que consumen, gas principalmente. Tal es el caso de Saica (que aglutina un tercio del total de este tipo de generación de energía en Aragón), pero también de la factoría de automóviles de Opel España en Figueruelas, del grupo Stellantis.
Fuentes de esta última apuntaron ayer que en la primera parte del año aún se ha hecho uso de la cogeneración, pero que cada vez se está dando más prioridad a las renovables. La fábrica de automóviles tiene en marcha en la actualidad, precisamente, un plan de descarbonización. Stellantis se ha marcado como un desafío cubrir el 80% el consumo eléctrico de su planta de Zaragoza con energía renovable propia a finales de 2023, objetivo en el que se trabaja ya con una instalación de placas fotovoltaicas muy avanzada y la de aerogeneradores en un futuro muy próximo.
