Las matriculaciones de coches han repuntado en Aragón un 23,76% del 1 al 17 de agosto. Según datos aportados por Faconauto, en la primera mitad de mes se han vendido 896 coches en nuestra comunidad lo que supone casi una cuarta parte más que en el mismo periodo del año anterior.

Las razones, explican desde Anfac, son las mismas que en el resto de España donde el repunte en ventas de vehículos en esta primera mitad de mes ha alcanzado el 30%: por un lado, el componente estacional ya que la mayoría de usuarios espera a vacaciones para comprarse un coche; y por otro, la entrada en vigor el 1 de septiembre de los nuevos test de emisiones y consumos WLTP (por Worldwide harmonized Light vehicles Test Procedure) que ha llevado a los concesionarios a lanzar un aluvión de ofertas con grandes descuentos de hasta el 35%.

Unas ventajosas condiciones con las que buscan librarse de un ‘stock’ que en 15 días, a partir del 1 de septiembre no podrán comercializar salvo que los coches no vendidos se los hayan automatriculado para después sacarlos al mercado como vehículo de ocasión o de kilómetro cero.

De esta forma, hasta el viernes 17, de acuerdo a las cifras de Anfac, se habían vendido en España más de 45.200 coches mientras que durante todo agosto de 2017 se vendieron un total de 72.888 turismos. Si las ventas siguen a este ritmo en lo que queda de mes, este agosto podría alcanzar la cifra más alta de matriculaciones desde 2007, es decir, antes de la crisis. En julio el incremento fue ya notable con 131.176 coches vendidos, un 19,3% más que en el mismo mes del año anterior.

"Esto ya se veía venir. Con la nueva normativa de medición de emisiones, los concesionarios están intentando venderlo todo con descuentos superiores al 35% o el 40%", reconocieron fuentes del sector que esperan a ver cómo se concreta el impacto en el cliente final.

No obstante, algunos responsables de concesionarios lo tienen muy claro. "En cuanto las nuevas emisiones se publiquen, muchos coches subirán en la escala y aquellos que teóricamente tenían unas emisiones menores a 120g/km y estaban exentos de pagar impuesto de matriculación, tendrán que pagarlo y a algunos también les tocará pagar más".

Sin embargo, desde Anfac, recordaron que "esta forma más exacta de medir las emisiones, con la nueva normativa, afecta sobre todo a los fabricantes y concesionarios y que se está negociando aún su impacto en el usuario final del coche". Hasta ahora el valor de las emisiones estaba referenciado al impuesto de matriculación, pero será a partir del próximo mes cuando habrá qué ver cómo se traslada, añadieron desde la Asociación española de fabricantes de automóviles y camiones.

Asimismo, desde Anfac precisaron que este crecimiento en ventas no va en paralelo a la renovación del parque automovilístico español, uno de los más envejecidos de Europa. Tampoco ayudan las informaciones contra el diésel que están generando "incertidumbre en el cliente a la hora de elegir modelos y motorizaciones".

Desde Faconauto advirtieron de la repercusión en el empleo que puede tener la caída en picado del coche diésel. "En julio las adquisiciones de estos vehículos por parte de familias y particulares cayeron un 40%". El comprador debe saber, precisaron desde Anfac, que "la producción de vehículos diésel en España representa un 42%" y que nada tiene que ver el impacto en emisiones de un coche nuevo diésel con uno antiguo, que el problema es de renovación del parque y no de tecnología del diésel, cada vez más eficiente y menos contaminante. "Estamos tirando piedras contra nuestro propio tejado", dijo David Romeral, director gerente del Clúster de la Automoción en Aragón.

"Todo lo que se ha invertido en tecnología diésel de menores consumos y emisiones no se puede tirar. Ha de haber una transición, que convivan distintos sistemas de propulsión y unos tiempos".