La plantilla de la línea del Corsa podría tener que adelantar sus vacaciones por falta de piezas

Hay un "riesgo alto" de que pare la producción al no llegar suficientes motores, pero se siguen buscando soluciones.

Un Citroën C3 Aircross, en la cadena de montaje de la planta de Opel en Figueruelas.
Un Citroën C3 Aircross, en la cadena de montaje de la planta de Opel en Figueruelas.
Guillermo Mestre

Aunque la fábrica de Opel Figueruelas no ha tenido todavía que reducir la velocidad de la línea del Corsa ni pararla por la falta de suministro de motores de la familia cero de gasolina de este modelo (los de menor potencia), la dirección ya avisó al comité de empresa el pasado viernes de que esta situación podría darse. Algo que les obligaría a adelantar una semana las vacaciones de toda la plantilla que trabaja en esta línea, la 2, que en lugar de irse del 30 de julio al 19 de agosto como sus compañeros de la línea 1, se marcharía a partir del lunes próximo utilizando vacaciones colectivas.

Todo dependerá de si la dirección de Opel España es capaz de garantizar el aprovisionamiento de motores mientras prosiga la huelga de uno de los proveedores de la fábrica de Opel que los hace en Aspern (Austria), que es la que los suministra a la de Zaragoza, junto con la de Tychy (Polonia), o si no encuentra solución para garantizar que esta pieza, imprescindible para montar el coche, continúe llegando. Hasta ahora, según fuentes sindicales, "por criterios comerciales se está favoreciendo la producción en nuestra planta en detrimento de la de Eisenach (donde se han adelantado las vacaciones) y otras que ya han parado", es decir, que en Figueruelas no se está dejando de fabricar: en lugar de los coches que llevaban esas motorizaciones se buscan alternativas como turbo, diésel, etc.

Así las cosas, el problema, según las mismas fuentes, ya no es tanto el de la carencia de motores sino el de los proveedores "que tienen que fabricar una cantidad no prevista de piezas para esos coches alternativos" montados con otras motorizaciones. Si esta semana "la posibilidad de desabastecimiento se da en 4 de esos proveedores, la próxima se daría en 24, que no tienen garantías de cumplir con los nuevos requerimientos", por lo que se considera que existe "riesgo alto de detener la producción en línea Corsa".

Aunque desde la compañía siguen buscando soluciones para continuar con la actividad productiva tal y como estaba planificada, esta situación de falta de suministro ya les obligó a parar este pasado sábado –pese a estar marcado como productivo en la línea del Corsa– y previsiblemente tendrán que hacer lo mismo este sábado y el próximo. De hecho, los sindicatos ya han solicitado a la dirección de Opel España que "anule la jornada productiva de la noche del 27 y del sábado 28", al entender que "tienen que poner la misma diligencia para resolver esto que la que se está poniendo en el caso que nos ocupa" y en otros similares como la huelga en Android, que se desconvocó en el último momento y por dos veces hace un par de meses.

Tanto los trabajadores afectados como los sindicatos están muy pendientes de cómo evoluciona la situación para saber cuándo se van de vacaciones y en qué condiciones van a a volver, ya que no está claro que "el arranque se haga en condiciones normales" y de si habría que reforzar algunos puestos específicos, atender posibles cuellos de botella o recurrir al ‘Andon’, un sistema utilizado para alertar de forma visual de problemas en un proceso de producción.

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