Los productos ecológicos de la Comunidad tendrán una presencia más relevante y una promoción diferenciara en los lineales de Carrefour, donde no solo se incrementará el número de referencias con sello aragonés, sino que además se dará entrada a productos que hoy en día no se comercializan en sus establecimientos. Y aunque esta acción comenzará en los supermercados implantados en Aragón, la cadena de distribución no descarta que se extienda por otros centros repartidos por todo el país.

Es una de las actuaciones en las que se concretará el acuerdo marco firmado este jueves entre el consejero de Desarrollo Rural y Sostenibilidad, Joaquín Olona, el director regional de Carrefour Madrid Este y Aragón, Francisco José López Nieto, y el presidente del Comité Aragonés de Agricultura Ecológica (CAAE), José Miguel Sanz, para la ejecución de proyectos y acciones de promoción y consumo de productos ecológicos certificados.

«Este acuerdo se enmarca en la estrategia de transición alimentaria de Carrefour que se concreta en la ampliación de la oferta de alimentos saludables, en la creación de una marca propia de nuevos productos adaptados a esta demanda cada vez mayor y en la apuesta por productos frescos de calidad», explicó López Nieto, que detalló que el objetivo final de la firma es «ser líder de la democratización de los productos ecológicos». Para ello, reconoció Nieto, es necesario que aumente y se diversifique el número de operadores y los productos elaboradores, porque solo de esta manera se conseguirá reducir los precios de estos alimentos "que hoy en día son todavía bastante más caros que los de la agricultura convencional".

El presidente de CAAE destacó que este tipo de convenios son los que permiten el desarrollo de este tipo de producción en la Comunidad, donde existen unos 800 operadores, de los cuales más del 70% son cerealistas, un 4% se dedican a la producción de frutas y hortalizas y entre un 8 y un 10% producen vino o aceite. «A la ganadería le está costando un poco entrar en este tipo de producción», reconoció Sanz, que, sin embargo, se mostró convencido de que con el tiempo «un producto de lujo» como el Ternasco de Aragón estará bajo este sistema de producción. Eso sí, quiso replicar al representante del Carrefour, para dejar claro que si los alimentos con sello ecológico exigen un mayor desembolso al consumidor es porque sus coste de producción son también más elevados. "Dar valor a la alimentación tiene un precio", puntualizó Sanz.

El consejero de Desarrollo Rural justificó al apoyo del Gobierno a este acuerdo porque "me pareció una obligación", dijo Olona, que insistió en que la agricultura ecológica es una necesidad "tanto términos medioambientales como en términos de salud". Pero, sobre todo, es una oportunidad "tanto desde el punto de vista productivo, como comercial o de creación de empleo, y, sobre todo, porque tiene un alto valor social ya que se apoya en explotaciones familiares". 

Para el consejero el acuerdo firmado expresa la importancia de acercar los distintos eslabones de la cadena alimentaria, porque "no tendría ningún sentido excluir a la gran distribución de la promoción y la difusión de estos alimentos y la mejor manera que hay de hacerlo es que esté en los lineales".

Olona señaló que no solo hay que potenciar la difusión de la productos ecológicos entre los consumidores, sino que hay que poner un especial énfasis en promocionarlos también entre los agricultores. "Eso es lo que vamos a hacer desde el Departamento de Desarrollo Rural", señaló el consejero, que aseguró que en Aragón "hay un interés potencial" por este tipo de producción, pero reconoció que "hay que romper esa limitación de verlo como un cauce para obtener determinadas subvenciones y considerarlo con un sentido más comercial, y eso no quiere decir que no tenga que tener subvenciones", matizó.