Sin avances en la negociación en Android

Dirección y comité de empresa de Android, una de las auxiliares de Opel que trabaja dentro de la factoría, han iniciado este miércoles la negociación de la inaplicación de convenio que afecta a más de 340 trabajadores. El comité ha pedido que renuncien a la propuesta de inaplicación de convenio que hay encima de la mesa o que la justifiquen documentalmente y ha vuelto a mostrar su negativa a hablar de bajadas salariales. Así las cosas, el acuerdo se prevé difícil, máxime cuando lo que pase en este proveedor va a marcar las líneas a seguir en el resto.

"No vamos a aceptar rebajas salariales ni en el proceso de inaplicación ni de negociación de convenio", ha insistido el comité mientras la empresa quería retomar el diálogo sobre la última propuesta que les presentó y que sí recogía un recorte en salarios. Según han informado los sindicatos, para la próxima reunión, que será este viernes le han pedido a Android que acredite los motivos de la inaplicación y que traiga una propuesta que no incluya la rebaja salarial.

Si bien, la dirección de Android ya les ha trasladado también que con el salario actual que marca el convenio no van a poder renovar la contrata sino que Opel va a buscar otras que se lo hagan más barato. Ante esta posición, los sindicatos han reiterado que ni en Android ni en otras auxiliares pueden permitir que se paguen salarios por debajo de los 20.000 euros al año.

De esta forma, el panorama para que las auxiliares negocien sus convenios se presenta bastante complicado con un marco laboral en la propia Opel, aprobado en enero, que recoge contención salarial este año y que reduce un 5% los pluses de festivos y nocturnidad y fija la reducción progresiva hasta su eliminación en 5 años del plus de calendarios especiales, entre otras cosas. Ahora, toca negociar en Android pero también en Insonorizantes Pelzer han de renovar convenio y en IAC (International Automotive Components) están tratando también de alcanzar un acuerdo sobre la rebaja salarial del 5% que les pide la empresa en Figueruelas  a los operarios que se encargan de la secuenciación del paragolpes del Corsa pese que a que en la planta que tiene este proveedor en La Rioja se haya firmado un incremento salarial del 2%.

Es decir, que a las auxiliares Opel les exige reducción de costes y flexibilidad, además de esfuerzo tecnológico e inversor para ser un 'partner' de la compañía a la hora de ganar en competitividad y poder así seguir generando nuevos modelos y carga de trabajo para toda esta industria satélite. Sin embargo, los sindicatos no parecen dispuestos a permitir que se rebajen más las condiciones salariales de unos trabajadores que en muchos casos están muy poco por encima del salario del convenio del Metal. La negociación se presenta complicada cuando además la nueva propiedad PSA tiene como objetivo prioritario volver a la rentabilidad y reducir costes en todas las áreas de negocio.