Borsao inicia la segunda fase de su nueva bodega en la que invertirá 15 millones de euros

Borsao se prepara para acometer la segunda fase de construcción de su nueva bodega, una inversión total que rozará los 15 millones de euros. La emblemática marca de la Denominación de Origen Campo de Borja ha culminado ya la instalación de su sala de depósitos, que tendrá ahora una capacidad para 10 millones de litros, y sus equipamientos de frío. En esta primera fase se han invertido 6 millones de euros. Y ahora Borsao se prepara para levantar el edificio que albergará la planta embotelladora, los almacenes y las oficinas, unos trabajos menos costosos en tiempo, pero que supondrán un desembolso mayor, alrededor de unos 9 millones de euros.

La nueva bodega, construida sobre una superficie de más de 100.000 metros cuadrados, está situada en el polígono industrial de la localidad zaragozana y responde a la necesidad de la empresa, en la que participan las cooperativas de Borja, Pozuelo de Aragón y Tabuenca, de incrementar su tamaño para dar respuesta a la creciente demanda de los mercados, especialmente exteriores. Pero su puesta en marcha, prevista para finales de este año, no supondrá el cierre de las instalaciones situadas en el centro del municipio, donde "era imposible ampliar más", señaló ayer Eduardo Ibáñez, presidente de Bodegas Borsao.

Crecimiento de las ventas

Ibáñez explicó que "todo el vino certificado con D. O. se llevará a estas nuevas instalaciones, e incluso se trasladará allí la sala de barricas, aunque eso será en una tercera fase". En las antiguas instalaciones se elaborará el vino de mesa.

El máximo representante de Bodegas Borsao insistió en que la inversión tiene la mirada puesta especialmente en el futuro y en la necesidad de estar preparado para una dar respuesta al crecimiento de las ventas. De hecho, actualmente producen unas 10 millones de botellas, cantidad que aumentará hasta los 14 millones cuando la nueva bodega esté a pleno rendimiento. Su embotelladora permitirá producir 10.000 botellas cada hora, cuando actualmente se embotellan 4.000 botellas/hora.

Aunque no se concretado el número de puestos de trabajo que podrían generar las nuevas instalaciones, el presidente de Bodegas Borsao prevé que podrían crearse unas seis nuevos empleos que se unirían a la plantilla actual compuesta por 50 trabajadores.

Pioneros en garnacha

Hay que bucear hasta 1958 para encontrar los inicios de esta bodega. En ese año se fundaba la cooperativa de Borja, precursora de la mítica marca Borsao. Pero el gran salto internacional se produjo en 2001 cuando la marca comercial tomó personalidad jurídica con la constitución de la sociedad Bodegas Borsao, en la que aunaron esfuerzos, recursos y medios las cooperativas de Borja, Pozuelo de Aragón y Tabuenca. Si algo caracteriza a Bodegas Borsao es su apuesta por la garnacha y su valentía al atreverse con el mercado estadounidense. En ambos aspectos fueron pioneros.

Motor de la Denominación de Origen Campo de Borja, integra unas 2.400 hectáreas y 620 viticultores y sus laureados y apreciados vinos –se exporta el 80% de la producción– viajan por toda el planeta, desde Canadá a Japón, pasando por el Reino Unido y todos los países de Centroeuropa e incluso Australia.