Las comunidades autónomas gobernadas por el PSOE han asegurado que no aplicarán los recortes sociales que consideran que "impone" el ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro.

El secretario de Economía del PSOE, Manuel de la Rocha, ha criticado, tras su reunión con los consejeros socialistas de Hacienda, que el Gobierno en funciones haya tomado decisiones unilaterales, como la elaboración de un nuevo Plan de Estabilidad sin negociarlo con las Comunidades ni pasarlo por el Parlamento.

De la Rocha ha afirmado que "el PSOE lleva años denunciando que los objetivos de estabilidad no eran asumibles, y que el reparto del déficit entre administraciones es muy injusto". "Finalmente el Gobierno nos ha dado la razón y propone un retraso en la reducción del déficit", ha añadido.

"Las comunidades autónomas no pueden ser el chivo expiatorio del agujero fiscal que nos deja el gobierno del PP", ha dicho el representante socialista, quien ha recordado que desde 2011 las comunidades han reducido el déficit en 3,46 puntos del PIB, superior al asumido por el Estado.

Por tanto, "el problema de credibilidad fiscal de España ante Bruselas es responsabilidad únicamente de Mariano Rajoy, con sus bajadas electoralistas de impuestos y el agujero en las cuentas de la Seguridad Social que va a dejar", ha explicado.

Además, De la Rocha ha exigido que se deje de utilizar el Fondo de Liquidez Autonómica como instrumento de chantaje y coacción.

Por su parte, el secretario de Política Federal, Antonio Pradas, ha señalado que "las nuevas medidas que Montoro está demandando esconden recortes de gasto social para varias comunidades y esto es inaceptable para un país con los niveles de desigualdad y pobreza actuales".

Por esta razón, las comunidades gobernadas por el PSOE no harán los recortes sociales que impone Montoro, ni votarán en el Consejo de Política Fiscal y Financiera a favor del Plan de Estabilidad, ni del reparto del déficit propuestos por el gobierno, según Pradas.

También ha exigido a Montoro que los gastos por la epidemia de hepatitis C no computen en el objetivo de déficit de las comunidades.