Los inversores extranjeros retiraron 1,3 millones al mes de Aragón durante el año pasado

Las inversiones extranjeras en la Comunidad se frenaron tras tes años de continua recuperación.

El dinero extranjero que llega a Aragón mediante inversiones echó el freno de mano el año pasado. Durante 2014, las desinversiones de capital realizados por empresas extranjeras fueron superiores al dinero que cruzó las fronteras de la comunidad autónoma en 16 millones de euros, un marco que deja a Aragón como uno de los territorios menos favorecidos en el balance nacional, que en su conjunto siguió recuperándose tras el letargo en las inversiones vivido durante los años más duros de la crisis, creciendo un 18,8% en términos netos.


Pese a este 'parón' -que tiene relación con el número de firmas foráneas que deciden ampliar una planta o aumentar capital, o por el contrario disminuir su presencia-, los expertos puntualizan que lo importante es atisbar si esta tendencia puede marcar los años venideros. “En España las inversiones extranjeras siempre están polarizadas por Madrid y Barcelona ya que se toma como referencia el domicilio social de empresa, por lo que regiones como Aragón pueden resultar más volátiles. Dicho esto, hay que vigilar que esta tendencia no rompa la línea mantenida en los últimos años”, explica Marcos Sanso, profesor del Departamento de Análisis Económico de la Universidad de Zaragoza.


Y es que, si bien desde hace tres años la inversión productiva extranjera en la Comunidad no ha dejado de ascender después del erial en el que se convirtieron los primeros años de la crisis (solo en Aragón se pasó de recibir 134 millones en 2009 a 47 al año siguiente), durante el año pasado la inyección de capital extranjero se redujo en más de un 34%, pasando de 169 millones atraídos en 2013 a solo 111.


Por contra, los procesos de desinversión de las firmas extranjeras 'sacaron' de la Comunidad 127 millones el año pasado, casi ocho veces más que en 2013, cuando tan solo fueron 17.


Los efectos en la economía real de estos datos no son para nada lejanos. El cierre de Tata Motors en Zaragoza, los procesos de extinción en HP Outsourcing, o la salida de Barclays de España encuentran su contrapunto positivo en las inversiones que GM ha tenido que realizar para relanzar la planta de Figueruelas tras la adjudicación de los nuevos modelos, la inversión de 30 millones de euros de la multinacional alemana Bauhaus para instalar su nueva planta o el reciente anuncio de llegada de la firma de componentes auxiliares de automoción Cooper Standard a Tarazona.Del 0,6% de Aragón al efecto en Cataluña

Con todo, el descenso cosechado el año pasado vuelve a dejar a Aragón como una de las comunidades autónomas que menor inversión capta del extranjero. En concreto, los 111 millones que recibió la Comunidad solo representa el 0,6% de todo el dinero que llegó a España, donde Madrid copa casi el 50% de las inversiones con más de 8.700 millones de euros.


A la capital española le sigue Cataluña, que, no obstante, el año pasado perdió un 15% de su capacidad para atraer a firmas de fuera de España, algo que algunos sectores achacan a la inestabilidad creada por el proceso soberanista y que llevó a mitad del año pasado a cruzar datos contrapuestos entre Ministerio de Economía y la Consejería catalana del ramo. Donde unos decían que las inversiones habían caído un 45% a mitad de año, el gobierno catalán rebatió que en realidad se había producido un ascenso del 35%.


De un modo u otro, los datos ofrecidos por el Ministerio sí que dejan claro que el año pasado la polarización de las inversiones se acentuó en cuatro autonomías -además de las citadas, País Vasco y Valencia- dejando por contra a otras diez regiones, entre las que se encuentra Aragón, que juntas no llegaron a recibir ni un 10% de todo el capital extranjero que llegó a España.