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Tareas pendientes para la SD Huesca en la semana del regreso
El club espera cerrar a Loureiro y solucionar más salidas con vistas al inicio de los entrenamientos este jueves.
La SD Huesca pone fin a las vacaciones y se apresta para volver al césped con Cuco Ziganda a los mandos y una base amplia, de 20 fichas profesionales, que se completará con canteranos durante estos primeros pasos. Detrás de los números aparece, sin embargo, la tarea pendiente para la dirección deportiva encabezada por Ángel Martín González con fichajes por concretarse, salidas por confirmarse y la edificación de una plantilla que debe sobreponerse a bajas tan sensibles como las de Andrés Fernández, Juan Carlos Real o Andrei Ratiu, que será traspasado.
El club azulgrana ha realizado en lo que va de verano dos incorporaciones con la continuidad de Óscar Sielva, que tras su cesión desde el Eibar ha firmado por tres campañas; y el fichaje de otro centrocampista, Iker Kortajarena, que llega libre de la Real Sociedad y será azulgrana hasta 2025. Ha confirmado las bajas de los jugadores que terminaban contrato el 30 de junio, Andrés Fernández, Juan Carlos Real, Pablo Tomeo y Florian Miguel, a los que se ha sumado la rescisión del contrato de Juan Villar. Otra continuidad, rubricada antes del verano, fue la del delantero Diego Aznar, por tres cursos y con el afán de que inicie la pretemporada a las órdenes de Ziganda.
El martes y el miércoles se llevarán a cabo los reconocimientos médicos, el jueves se desarrollará en la Base Aragonesa de Fútbol el primer entrenamiento del verano y al día siguiente se iniciará la habitual concentración en Benasque, que se prolongará hasta el 13 de julio. Un punto de partida para el que se quiere contar con el lateral diestro Miguel Loureiro a la espera de que se termine de rubricar un acuerdo que también contente a su club, el Lugo. El precio de partida en las negociaciones era de 250.000 euros, y el club gallego había rebajado sus pretensiones y relajado el gesto al entender que se trata de la mejor salida para el futbolista de 26 años, que quiere seguir ligado al fútbol profesional.
Una operación que, mientras se acaba de perfilar, aparece vinculada a la venta de Andrei Ratiu, por quien ha mostrado interés el Alavés y goza de cartel asimismo en Francia e Italia. De momento, el rumano es uno más y está citado como el resto de compañeros. La SD Huesca debe acometer asimismo el fichaje de un lateral zurdo como acompañante de Ignasi Vilarrasa y tiene el centro de la defensa bien definido con Jorge Pulido, Jérémy Blasco y Rubén Pulido más el canterano Hugo Anglada. La baja de Florian Miguel se quiere compensar con otro futbolista polivalente que pueda rendir en el eje de la zaga.
La portería aparece cubierta en este momento por Álvaro Fernández, que regresa de su cesión en el Espanyol, y Juan Pérez, firmado en el mercado invernal y que no llegó a debutar de manera oficial. Una dupla que el club considera de garantías, y también una cohabitación entre dos guardametas que presentarán un duelo descarnado por hacerse con la titularidad. La situación del riojano, que había mostrado su deseo de seguir en Primera División, es otro de los puntos que tendrán que gestionar Ziganda y Martín González. Mientras, Andrés aparece como objetivo de conjuntos como Albacete, Levante o Cartagena, aunque su deseo era el de encontrar sitio en Primera División.
En el centro del campo, la necesidad de un jugador creativo y con llegada, que dé claridad a la salida de balón del Huesca, se ha cubierto en parte con Iker Kortajarena. Pero el vacío que deja Juan Carlos Real, máximo anotador del curso pasado con ocho dianas y pretendido por clubes de la categoría de plata como Cartagena o Leganés, es grande y obligará a la dirección deportiva en abundar en ese tipo de futbolista. El medio del campo presenta a Óscar Sielva, Cristian Salvador, Manu Rico y Kortajarena, mientras que David Timor es otro de los jugadores con contrato en vigor que está ultimando su marcha.
El ataque, la línea más débil
El ataque es la línea más débil en estos momentos. No se han realizado incorporaciones ni se esperan a corto plazo, pues el objetivo de contar de nuevo con Samuel Obeng, por quien el Real Oviedo se ha descolgado con unas elevadas condiciones económicos, se cocina a fuego lento. La negociación ha partido de los 500.000 euros, una cifra inalcanzable para las arcas del club aragonés. Los asturianos inician la pretemporada el jueves y del 19 al 29 de julio se desplazan a México, por lo que el deseo de los oscenses sería haber resuelto para entonces este culebrón. A favor, la certeza de que el punta no cuenta para Álvaro Cervera.
La otra vuelta anhelada es la del osasunista Javi Martínez, que a priori se enfrenta a un panorama semejante al del pasado verano, con una elevada competencia. La continuidad de Abou Kanté, José Ángel Carrillo y Dani Escriche, que vuelve tras su préstamo al Albacete, no está clara debido a su cuestionable rendimiento el curso anterior. Todos ellos tienen contrato en vigor y el fichaje de otro delantero provocaría una sobrecarga con el añadido de los canteranos Kevin Carlos, Rafa Tresaco y Diego Aznar.
