Enric Gallego, un debut prometedor con la SD Huesca

"Me habría gustado tener más ocasiones y más acierto de cara al gol, pero al menos he aportado lo que siempre digo que no me falta, que es trabajo y ayuda al equipo". Enric Gallego fue uno de los nombres propios de la tarde del sábado en El Alcoraz. El ex del Extremadura debutaba con la camiseta de la Sociedad Deportiva Huesca y pareció estar conforme con su actuación, aunque con el pero de no haber podido marcar, algo para lo que sabe que ha sido fichado. También su nuevo técnico Francisco Rodríguez se mostró satisfecho con su labor. "Es un delantero fantástico, que ha hecho su trabajo, no ha tenido ocasiones, pero en el resto de labores ha estado muy bien", valoró el almeriense tras la derrota por 0-3 conel Atlético de Madrid.

Había sido el nombre protagonista durante la semana en la capital oscense. Su fichaje se había destacado incluso en los medios nacionales y buena parte de los focos estaban puestos en él. Cierto, se quedó sin inaugurar su cuenta de tantos como atacante azulgrana, la misma que con los de Almendralejo detuvo en quince, el que más en toda la Segunda División, pero su estreno en la élite dejó sobradas muestras de que puede ser muy útil a los intereses altoaragoneses.

Dos fueron las acciones en las que más brilló y ambas llegaron de forma consecutiva confirmando la descripción que de él había dado Emilio Vega, el director deportivo de la SD Huesca, en su presentación para recalcar que era mucho más que un atacante con gran presencia física, mide 1,90 metros: "Es coordinado con el balón y capaz de asociarse y asistir".

Primero, a los doce minutos de que el choque hubiese arrancado, un pase suyo dejó a Christian Rivera dentro del área y frente a la portería de Oblak. Prácticamente a continuación, un cabezazo en el centro del campo abrió el camino a Cucho Hernández para que éste encarase al guardameta esloveno de los rojiblancos. Ninguna de las dos ocasiones acabaron con el balón en la red, pero dieron una buena medida de sus posibilidades y del bien que un futbolista de sus características, de las que hasta ahora carecía la plantilla azulgrana, puede hacer al fútbol de Huesca.

A lo largo de los noventa minutos que se mantuvo sobre el césped, dio 17 pases buenos, remató en una ocasión, tras envío de Cucho Hernández, que dejó su sitió en la punta del ataque al catalán para ocupar el extremo derecho, recuperó tres balones, realizó cuatro faltas y vio una tarjeta amarilla. Es decir, peleó y buscó a sus compañeros. Solo le faltó, como el mismo señaló, más oportunidades de retar a Oblak.

Gallego es otro de los casos de jugadores españoles que han debutado esta temporada en Primera División de la mano de la entidad oscense con treinta años o más. Él tiene 32 y en este particular club le acompañan Ferreiro, justo con 30, y dos que ya han soplado 33 velas, Juan Aguilera y Roberto Santamaría. El zaragozano Jorge Miramón se queda en la puerta de entrada, No llegará a su tercera década de vida hasta el 2 de junio.

La historia del 22 de la SD Huesca ha sido la de una explosión tardía. No en vano, hace un año por estas fechas su rival sobre el terreno de juego no fue el Atlético de Madrid sino el Lorca y la semana pasada jugó en el Anxo Carro de Lugo. No empezó a entrar en el radar del fútbol nacional hasta prácticamente doce meses atrás, cuando el Extremadura, aún en Segunda División B, desembolsó al Cornellá 200.000 euros, algo fuera del alcance de la gran mayoría de equipos en la categoría de bronce. Cerró el curso con 29 goles y el ascenso a Segunda Division, ahora conjuntos como el Rayo, el Espanyol y el Valladolid andaban tras su pasos, pero se decidió por el Huesca, que ha pagado por él más de dos millones de euros. "Hay que seguir creyendo", manifestó el sábado convencido de que la salvación es posible.

También Yangel Herrera

En la visita del Atlético de Madrid no solo se vivió el debut de Enric Gallego, también se enfundó por primera vez la camiseta azulgrana el venezolano Yangel Herrera. Cedido por el Manchester City, tras pasar las dos campañas anteriores en el New York City, ingresó en el campo en el minuto 70 en lugar de Musto. Se mostró voluntarioso, pero, con el partido ya decantado, pudo entrar poco en juego.