"Todos debemos dar más para ganar puntos"

Musto cree que la solución a los males de la SD Huesca es "ganar y solo ganar" y "achicar el margen de error" que cuesta partidos

Musto, junto a Lluís Sastre, durante un entrenamiento de la SD Huesca.
Musto, junto a Lluís Sastre, durante un entrenamiento de la SD Huesca.
Rafael Gobantes

Expeditivo al corte y con la palabra, Damián Musto ha sido este lunes el mascarón de proa de la Sociedad Deportiva Huesca para expresar el estado de ánimo de la plantilla después del durísimo golpe, otro más, de Mendizorroza (2-1). El argentino ha mostrado un perfil batallador, el mismo que muestra sobre el terreno de juego, para insistir en las causas y las soluciones con que revertir la situación. Estrechar el margen de error y ganar de una vez por todas: nada más y nada menos.

Más allá de la mejoría experimentada con Francisco Rodríguez a los mandos, el pivote de 31 años alude a que las urgencias se encuentran por encima de la búsqueda de un juego bonito o un estilo consolidado. El gol de Molina en el último minuto y los desatinos ante el Alavés han hecho estéril por el momento la labor del entrenador en su primer mes. "En Vitoria pagamos caros los errores y no pudimos. De una forma más o menos acertada, la realidad es esa y se necesita ganar y solo ganar", ha insistido Musto.

El centrocampista, que ha visto siete amarillas en once partidos y es el futbolista más amonestado de la Liga, avisa una y otra vez de que "en esta categoría no te perdonan". Y añade que "venimos pagando caros los errores. Se trabaja, hemos hecho buenos partidos pero no alcanza. Nos podemos quedar con que hicimos un buen primer tiempo, o 90 minutos buenos en casa… Siempre sucede algo y vas perdiendo terreno, te ves en una posición que sinceramente no esperábamos. Creíamos que a estas alturas llevaríamos más de seis puntos, pero la realidad es que estamos en el fondo de la tabla".

Un presente que puede revertirse puesto que los azulgranas creen "en el trabajo y en cómo lo aplicamos", pero han de "cuidar los detalles porque no perdonan. Podemos trabajar y crecer en todos los aspectos, pero hay que achicar ese margen de error. No es como en Segunda División, aquí te hacen cuatro y te meten las cuatro. Es la realidad y hay que tratar de mejorar lo que nos lleva a perder puntos".

El vestuario del Huesca cerró filas alrededor de la figura de Rúben Semedo, cuyo error en el segundo gol fue la viva imagen de la fragilidad defensiva de un equipo que se desangra con un simple empujón y que a menudo se dispara al pie. Musto ha evitado juzgar a su compañero puesto que "le tocó esta vez a él pero nos pasó en varios partidos a futbolistas diferentes. No nos podemos permitir equivocarnos cada día más allá de los nombres propios. Tenemos que sacar partido cuando el rival se equivoca, hemos conseguido robar arriba y situaciones de uno contra uno que no se han aprovechado".

Y recalca que "no hay que caer sobre Semedo, somos un grupo y ahora en los momentos complicados seguimos juntos. El vestuario está golpeado pero se sale ganando". Asimismo, se trata de un problema colectivo: "Podemos hablar y analizar muchas cosas que se vienen haciendo bien pero no te alcanza. Cada uno debe dar más y somos conscientes de que no estamos al tope de nuestro rendimiento".

Ahora, el parón por los compromisos de las selecciones nacional se utilizará en el club aragonés, de manera análoga al tramo que coincidió con la llegada de Francisco, para recuperar piezas en lo físico y lo anímico. "Somos una plantilla corta y necesitamos de todos. Nos van a venir bien estas dos semanas para trabajar mucho y saber que se nos va la vida en el partido con el Levante (sábado 24 de noviembre a las 18.30 en El Alcoraz). Es la final del mundo, no se puede tomar de otra manera. Hay que conseguir el triunfo como sea, y jugando mejor hay más posibilidades".

La dicotomía entre una forma de trabajar que extrae un mejor rendimiento del plantel y la continuidad de los malos resultados hace concluir a Musto que "no sirve si no cosechas puntos. No alcanza con eso. Creo que el equipo trata de imponer intensidad, ir a presionar al rival. Se necesita también ese triunfo para ganar en confianza. La serie de derrotas genera desconfianza y no nos lo podemos permitir. Dios quiera que el Levante sea el inicio de una mejoría".

Y admite el argentino que "estamos donde el Huesca merece, la realidad es que tenemos seis puntos. Hemos hecho buenos partidos pero no hemos sumado. Es muy pobre lo que hemos realizado hasta ahora. De puertas adentro sabemos qué hacemos bien y qué hay que corregir. Fastidia cuando hay errores consecutivos similares en varios partidos. La línea de trabajo es la correcta y necesitamos ganar para salir de esa posición".

Un fallo defensivo tras otro

Desde la llegada de Francisco al banquillo del Huesca, en los cuatro partidos se han cometido errores que han costado goles y puntos. En Mendizorroza, el 2-1 llegó precedido de una acción en la que Semedo protegió bien la pelota ante Calleri pero se la cedió a Sobrino, que marcó con un fuerte disparo ajustado al palo izquierdo de Jovanovic tras pegar en el cuerpo de Pulido. En la jugada del empate, Brezancic no tapó bien el centro de Ibai y Jony se adelantó a Akapo y Pulido para batir a Jovanovic en su media salida.

Molina empató la semana pasada el partido para el Getafe tras zafarse con calidad de la marca de Pulido, a quien no llegaron a ayudar ni Musto ni Semedo. En Sevilla, el portugués no fue contundente en el 1-0 al tratar de cortar una internada de Ben Yedder por la derecha, que centró para que Sarabia marcase a placer ante Pulido y Etxeita. El segundo partió de una buena pared entre el bigoleador y Vázquez. Contra el Espanyol, el primero del Panda nació de un hueco dejado en la izquierda por la zaga azulgrana y el segundo de una pérdida de balón de Moi en el medio.

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