No le gustó a Fran Escribá el resultado global del parcheo improvisado en los dos laterales de la defensa del Real Zaragoza ante el Racing de Santander: Luna jugó en la derecha y Gámez fue trasladado a la izquierda. Ninguno de los dos alcanzó los mínimos exigibles por parte del cuerpo técnico y la línea defensiva quedó mellada en esas dos posiciones importantes en la pizarra a lo largo de los casi 100 minutos que duró el duelo contra los montañeses.

A consecuencia las bajas súbitas y simultáneas de Carlos Nieto y Quentin Lecoeuche, los dos laterales zurdos de la plantilla –grave la del primero ocurrida el pasado domingo en Cartagena–, Escribá tenía que inventarse un recambio para esa posición específica. Y, después de largas deliberaciones internas con sus colaboradores más estrechos, David Generelo y Javi Suárez durante las 48 horas previas al partido, no optó por tocar solo ese puesto, el del zurdo, sino que alteró los dos flancos de la zaga.

En la rueda de prensa posterior al partido se le planteó al entrenador la cuestión tras observar el mal resultado de la elección. «¿Se ha notado demasiado, no?», concluía la pregunta desde la bancada de prensa. Y Escribá fue directo: «Sí. Puede ser. Ya dije (en la previa) que no se podía usar nada como excusa. Pero Marcos Luna no había disputado minutos todavía (...). Y Fran Gámez, lógicamente, en la izquierda perdía recorrido. Se sacrificó por el bien del equipo», admitió.

No se quedó ahí Escribá en su argumentación respecto de la pérdida de solvencia en los laterales, derivada de su experimental prueba con Luna y Gámez: «Nos condicionó. Hasta ahora, Gámez en la derecha y Nieto en la izquierda nos estaban dando muchísimo, estaban participando mucho en el juego ofensivo. Con Gámez ubicado en el lado opuesto al suyo, como imaginábamos, hemos tenido menos profundidad», abundó el preparador blanquillo, un tanto arrepentido.

«Hay que adaptarse a esta situación hasta que recuperemos a Quentin Lecoeuche. Y, mientras, tratar de mejorar con lo que tenemos para que no nos condicione tanto», redondeó su análisis crítico con lo aportado por Luna y Gámez en este episodio ante el cuadro santanderino. Esta primera apuesta suya, elegida sobre la marcha, parece que no tendrá más recorrido, como se colige de sus palabras, aún en caliente.

Gámez volverá a su sitio

El próximo partido, en Ferrol, Escribá tiende a llevar de nuevo a su sitio a Gámez –al lateral derecho– y a buscar únicamente un parche en el ala izquierda de la defensa. Tal vez el mayor riesgo en el fallido plan por el que apostó ante el Racing de Santander radicaba en que tocaba dos puestos en vez de solo uno. Y no salió bien.

Luna se quedó muy escaso en aportación general, con más sombras que luces en su retorno a la titularidad como lateral diestro. Y Gámez dejó patente que su manejo de la pierna izquierda, nada eficaz, mutila notablemente sus prestaciones como lateral ofensivo, pues sus conducciones, controles y centros se llenan de defectos y no son lo limpios que fluyen cuando se mueve por su lugar natural, la derecha.

Así que, como a Escribá le gusta la aportación de Gámez en el carril del ‘2’, en Ferrol recuperará su demarcación. Al entrenador se le preguntó directamente si caben posibilidades de seguir insistiendo con esta mezcla Luna-Gámez en los dos laterales del equipo. Y el técnico fue cristalino.

«No. Vamos a pensar otras cosas, vamos a pensar otras cosas...», dijo con una redundancia que hay que transcribir textualmente, porque tiene su aportación relevante a la información oral del técnico. Remarca. Martillea. Emite decepción por el resultado obtenido en una apuesta primera que no volverá a probar.

«Lo de hoy era... no era una prueba. Habíamos entrenado con varias opciones, con todos», dudó Escribá en el momento de calificar su propuesta y justo antes de redundar que en Ferrol mutará su idea. «Ahora se presenta un partido distinto y habrá que pensar. A lo mejor nos interesa otro tipo de futbolista ahí. O, como he valorado durante este partido, cambiar a Luna y a Gámez de banda, pensando que Fran nos volverá a dar mucha profundidad por la derecha. Además, seguirán con nosotros Borge y Juan Sebastián, que también pueden jugar», concluyó, citando al final a los dos zagueros del Aragón que tienen, tras este equivocado ensayo, más opciones de entrar en el formato de provisional remiendo táctico de Escribá.