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Semana clave para la operación salida en el Real Zaragoza

El club pretende que en la concentración de Boltaña, que arranca el viernes, Carcedo maneje un plantel más reducido

La plantilla del Real Zaragoza, en un entrenamiento.
La plantilla del Real Zaragoza, en un entrenamiento.
Toni Galán

La semana que empieza se antoja clave en la operación salida del Real Zaragoza. El club aragonés trabaja a toda velocidad para encontrar acomodo a los futbolistas que no cuentan para el nuevo proyecto. La dirección deportiva que encabeza Miguel Torrecilla pretende que reducir el número de fichas para que en la concentración de Boltaña (del 15 al 23 de julio) Juan Carlos Carcedo pueda manejar un plantel más ajustado a lo que será la próxima temporada.

Hasta el momento, las únicas salidas confirmadas son las de Sabin Merino, cedido al Atlético de San Luis mexicano; Carlos Azón (SD Logroñés); Marc Aguado (Andorra); Ángel López (Calahorra) y Vuckic; pero hay media docena de jugadores que ya saben que no continuarán al año que viene y otros tantos que dependen de la opinión de Carcedo y de las propuestas que lleguen por ellos.

Javi Ros, Baselga, Buyla, Nieto, Lasure, Carbonell o Clemente, que apunta a ser compañero de Aguado en el Andorra de Piqué, tienen abierta la puerta de salida. Y el club también considera la marcha de Narváez, aunque su caso es singular y podría conllevar uno de los culebrones del verano.

Las propuestas que han llegado por el atacante colombiano no han convencido a sus agentes, que tampoco contemplan la rescisión amistosa de un contrato que expira en junio de 2023 y que contiene uno de los sueldos más elevados de la plantilla zaragocista.

Juanjo Narváez percibe alrededor de 500.000 euros anuales, y pocos equipos de España, que es la prioridad del jugador, pueden permitirse una cifra así. De ahí que su salida, que liberaría ostensiblemente la masa salarial, pueda demorarse. 

Quinteros por Clemente

Más próxima a resolverse parece la situación de Clemente. La llegada de Jairo Quinteros, el mejor colocado para ser el cuarto central de la plantilla, le cerraría las opciones de seguir, aunque Carcedo está muy satisfecho con el rendimiento ofrecido por el canterano en el arranque de la pretemporada.

Si acaba saliendo, su destino más probable -en calidad de cedido- es el Andorra de Piqué. Allí se valora muy positivamente el perfil de un jugador con buena salida de balón, que todavía tiene margen de mejora hacia un futuro asentamiento en La Romareda.

Del mismo modo, el club también entiende que Baselga, Buyla o Carbonell pueden seguir creciendo a través de cesiones; y busca acomodo en Segunda a Ros, Nieto y Lasure, aunque de momento no maneja ofertas en firme. 

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