El Real Zaragoza logra acabar 2018 en el puesto 17º, dos puntos por encima de la zona letal

La preciosa victoria ante el Extremadura saca a los blanquillos de los puestos de descenso y permite ver el futuro con más optimismo. El equipo tiene a tiro de un partido el puesto 13º.

Clasificación de la parte baja de la clasificación de Segunda División a la conclusión de la 19ª jornada, la última de 2018.
El Real Zaragoza logra acabar 2018 en el puesto 17º, dos puntos por encima de la zona letal
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El Real Zaragoza, a través de su preciosa victoria por 2-1 ante el Extremadura de Almendralejo en esta jornada 19ª que acaba de concluir este domingo, logra salir de los puestos de descenso a Segunda B, en los que vivió en las dos últimas semanas, y acaba el año natural de 2018 en el puesto 17º de la tabla clasificatoria.

El equipo aragonés, con 19 puntos en 19 jornadas, tiene por delante todavía una ardua tarea hasta lograr un nivel de estabilidad en las rentas que le permitan observar con cierta calma su presente, algo que aún no es posible. Pero las sensaciones globales han mejorado ostensiblemente después de este episodio victorioso ante los extremeños, coincidente con el estreno del tercer entrenador del equipo en lo que va de curso, Víctor Fernández, que toma el relevo así de Lucas Alcaraz, quien sustituyó a Imanol Idiakez en octubre.

Los zaragocistas, merced a esta vital suma de 3 puntos en un duelo directo en la cola de la tabla ante el Extremadura, se marchan a las breves vacaciones de Navidad ubicados 2 puntos por encima de los puestos letales, que ocupan el colista Nástic de Tarragona, desenchufado con solo 13 puntos; y tres equipos igualados con 17: Reus, Córdoba y el citado Extremadura. Se trata de un alivio visual de enormes beneficios anímicos. Y, además de este cuarteto, también se queda por detrás de los blanquillos el Tenerife, pues aunque porta sus mismos puntos (19), tiene peor 'golaverage' momentáneamente.

Por delante, este impulso obtenido por el Real Zaragoza en este último fin de semana con liga de 2018 (en el último de diciembre se lleva a cabo el parón de fin de año), ha acercado a los blanquillos a tiro de un solo partido de hasta 4 equipos que caminan antecediéndole en la clasificación. Así, sus referencias más inmediatas para seguir adelantando paulatinamente en un futuro a más adversarios son el Rayo Majadahonda, que es 16º con 20 puntos (uno más que los zaragocistas); el Elche y el Lugo (15º y 14º con 21); y el Numancia, con 22, que camina en el escalón 13º. Hasta ahí sería capaz de subir el Real Zaragoza a corto plazo si lograse enlazar una nueva victoria en Gijón en la penúltima cita de la primera vuelta, que se disputará ya con 2019 empezado (en casa del Sporting, el Zaragoza jugará el sábado 5 de enero a las 16.00). El siguiente tramo, que cierra el Oviedo (12º con 24 puntos), ya forma parte de otra dimensión, ahora demasiado alejada de los blanquillos.

Para los intereses del Real Zaragoza, la jornada 19ª ha tenido resultados de todo tipo en cuando a la incidencia directa en su trayectoria próxima. Fue buena la derrota del Nástic el viernes en Mallorca por 2-0. También la del Reus, en la matinal dominical, en su casa por 0-1 frente al Osasuna. Y otra derrota  favorable de un rival cercano que se consumó este domingo fue la del Rayo Majadahonda, por 1-0 en Albacete. Por supuesto, el cuarto equipo que cayó derrotado de los de la zona baja fue el Extremadura... en el duelo directo de La Romareda.

En otro microscopio hay que analizar los resultados que pudieron ser mejores marcadores para las necesidades zaragocistas y que, al final, se quedaron a medias. Son los casos de los empates del Tenerife en la isla ante el Granada (1-1, cuando perdía 0-1 hasta el tiempo de aumento); el del Elche, en su estadio, frente al Almería (2-2, cuando perdía 1-2 en la recta final del choque); el del Numancia, que igualó en Alcorcón (1-1, tras ir perdiendo 1-0 hasta los últimos minutos); y el del Lugo, que aguantó el 0-0 en su campo, el Anxo Carro, frente a un Sporting de Gijón que gozó de más ocasiones de gol.

Por último, en todo ese batiburrillo de nerviosos que componen el grupo que cierra la tabla casi a mitad de la competición, ha llamado la atención poderosa -y negativamente- la goleada a favor obtenida por el Córdoba ante el otrora potente Las Palmas, al que endosó un 4-1 en el Arcángel que lo saca de la penúltima posición y lo ata a la vida.

Como advirtió Víctor Fernández desde su llegada al frente del banquillo zaragocista hace 5 días, el trabajo de salir de los problemas va a ser largo, complicado y costoso para el Real Zaragoza. Y solo a través de victorias como la que va a celebrarse durante toda la Navidad frente al Extremadura, se conseguirá el objetivo final de no pasar apuros y garantizar la vida del club. De momento, el primer gran paso ya se dio este sábado con un triunfo meritorio, con brillo y de enorme efecto balsámico. Tres puntos que permiten mirar la clasificación sin que los efectos secundarios de vértigos y ansiedad tengan la graduación de los últimos 15 días. La medicina parece haberse encontrado.

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