Una victoria como salida

El Real Zaragoza busca en Tarragona, contra el colista, un triunfo que rompa su mala dinámica de resultados.Lucas Alcaraz recupera a Álvaro en la delantera del equipo como suplente.

Los futbolistas del Real Zaragoza transportan una portería antes del entrenamiento de ayer.
Los futbolistas del Real Zaragoza transportan una portería antes del entrenamiento de ayer.
José Miguel Marco

El Nou Estadi reúne a Nástic y Real Zaragoza (21.00/Gol TV) en un pulso entre débiles, dos de los equipos en peor forma y más necesitados del campeonato. A ninguno de los dos conjuntos le sirve nada más que la victoria. El Zaragoza llora por ella. Le urge. La precisa. No tiene otro modo de salir del laberinto en el que anda metido. Solo ganando puede escapar de su prisión de malos resultados: ocho jornadas consecutivas sin ganar, una depresión que le ha dejado fondeando en la tabla de la clasificación, en posiciones de descenso a Segunda B. De nada sirve ahora mirar más allá de eso: eludir esas complicaciones, apagar las llamas y respirar con algún que otro triunfo.

Las voces que durante la semana han brotado del vestuario han reclamado eso, pegando los pies en la realidad, centrando el mensaje mucho más en el presente que en las expectativas. La gravedad de la situación marca la agenda del Real Zaragoza y la solución no tiene otra salida que un triunfo. Con uno, ganando hoy en Tarragona, se puede construir mucho. Desde una victoria, al equipo de Lucas Alcaraz se le presentarán nuevos horizontes. Tres puntos que le alivien la presión, le sofoquen su estado de ansiedad y le liberen de tensiones.

Al Zaragoza le pena ahora más su estado emocional que cualquier otra carencia futbolística. Está en un momento en el que las flechas en la pizarra no lo dicen todo: necesita ánimo. Y eso solo lo puede conseguir con victorias, con victorias que traigan nuevas victorias. Para la cita, en casa del colista, otro equipo con problemas, Lucas Alcaraz recupera a Álvaro Vázquez. Este regreso, no obstante, no le asegura la titularidad y el técnico podría aparcar el 4-4-2 y su rombo y apostar por un 4-3-3, con Aguirre y Pombo en los flancos ofensivos. Javi Ros tiene opciones de recuperar la titularidad, desalojando del once a Zapater. En la defensa, el conjunto aragonés presentará dos ausencias significativas, Grippo y Benito. El rocoso zaguero suizo se rompió la rodilla hace una semana y se perderá lo que resta de temporada. Álex Muñoz será su inmediato sustituto, a la espera de que en los próximos días el club pueda concretar la llegada de un nuevo central, una vez se tramite la baja federativa del lesionado defensor suizo. Su compatriota Buff también es baja, en su caso por un esguince en la rodilla, y esto podría motivar que Alcaraz cambie el sistema. Si opta por Pombo como mediapunta y Gual y Álvaro Vázquez como pareja de delanteros, ese dibujo no variará. Si Vázquez no entra aún en la alineación, el principal candidato al once es Diego Aguirre, apunte que llevaría a Pombo al extremo derecho, con Marc Gual como referencia principal en la punta del ataque. Otra novedad será la entrada de Julián Delmás en el lateral derecho, debido a la sanción de Alberto Benito, expulsado contra el Granada en la pasada jornada.

Por su parte, el Nástic no podrá contar con Abraham Minero, Ike Uche y Ramiro Guerra, ni tampoco con Iván López y César Arzo, estos dos últimos con lesiones de larga duración. Enrique Martín llegó hace menos de un mes al banquillo con su viejo recetario para los problemas, por lo que el Zaragoza, solo con mirar al técnico rival, puede adivinar el tipo de partido que le espera en Tarragona: pierna dura, intensidad y un adversario de firme convicciones colectivas.

Enrique Martín seguirá apostando por la defensa de cinco hombres, con Coris y Jiménez como carrileros, en un once en el que Manu del Moral apunta a arrebatarle la punta del ataque a Manu Barreiro.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión