A priori, números en la mano, las trayectorias en las tres cuartas partes de la liga que ya han transcurrido dicen que el Real Zaragoza es el favorito en su enfrentamiento ante el Alcorcón en La Romareda. Los avales de uno y otro no dejan lugar a dudas en el análisis previo: el equipo zaragocista es el quinto mejor local del torneo mientras que los madrileños acreditan la séptima peor marca de la liga en sus partidos a domicilio.

Al Real Zaragoza, en su rendiento en campo propio, solo hay cuatro equipos que lo superan. Los aragoneses, en las primeras 34 jornadas, han jugado en La Romareda 17 duelos con un balance de 10 victorias, dos empates y cinco derrotas. Eso da una renta de 32 puntos. Solo han sido mejores en sus respectivos estadios el líder Leganés (36 puntos hasta el inicio de esta jornada, 39 ya con el triunfo frente a la Ponferradina), el propio Alcorcón (36), el Oviedo (34) y el Nástic de Tarragona (33).

El Alcorcón, en contraposición a su excelente rendimiento en su feudo de Santo Domingo, está fallando de manera extraordinaria cuando juega lejos de casa: solo ha cosechado 16 puntos como visitante. Esta cifra solo la empeoran seis equipos de los otros 21 de la división. Por supuesto, los tres últimos clasificados: el Llagostera (es un desastre, con solo 3 puntos como huésped a base de tres empates), el Bilbao Athletic (solo ha sumado 8) y el Albacete (9). También llevan peor récord que los alcorconenses la Ponferradina (8), el Mallorca (11) y el Almería (13). Todos, sin excepción, del pelotón de cola, de los que llevan todo el año dándose golpes contra las paredes para intentar salir del pozo y salvar el pellejo en junio sin caerse a Segunda B.

No es propio de un equipo del grupo de cabeza, como es el Alcorcón, un grado de eficacia tan bajo cuando actúa como visitante. Solo gracias a la inexpugnabilidad habitual de su pequeño estadio de Santo Domingo, donde son fortísimos (solo han dejado escapar una derrota y seis empates), el equipo de Muñiz es incluso un claro aspirante a jugarse el ascenso hasta el último día. Pero fuera de casa, salvo una reacción postrera desde este fin de semana en Zaragoza, sus números son asimilables a una clasificación mucho más devaluada que la que ostentan en estos momentos. Su solvencia es paradójicamente simétrica, opuesta, según juegue en su campo o lo haga en el de sus adversarios. En casa son una bomba de eficacia. Fuera, un equipo al que se le agujerea con demasiada facilidad.

El Alcorcón, a domicilio, no obstante, ha sabido ganar cuatro partidos (los mismos que el Zaragoza). Lo hizo 1-3 en Córdoba al inicio de la liga; 0-2 en Tarragona, aún en octubre; 1-2 en Pamplona frente al Osasuna en noviembre; y, en su último éxito viajero, 1-2 en Tenerife el 4 de enero, todavía en la primera vuelta de la liga (hace ya más de tres meses). El resto de su cosecha de puntos como visitante son los cuatro empates que logró en Vitoria (1-1), en Ponferrada (0-0), en Soria (1-1) y hace 15 días en Almería (1-1) en su anterior salida.

En sus días malos, que han sido la mayor parte, ha acumulado ya nueve derrotas. A saber: 2-0 en Valladolid; 1-0 en San Mamés ante el Bilbao Ath.; 3-2 en Oviedo; 3-0 en Miranda; 3-0 en Leganés; 2-0 en Elche; 1-0 en Mallorca; 1-0 en Huesca; y 4-0 en el campo del Llagostera. Es decir, en ocho de esos nueve fiascos, sus jugadores de han quedado sin marcar, absolutamente a cero. El gol, pese al buen tino durante la temporada de su ariete David Rodríguez, se le niega demasiado a menudo al Alcorcón cuando sale fuera de Santo Domingo.

El Real Zaragoza, por su parte, busca ya su cuarta victoria en sus últimas cinco apariciones en La Romareda. Viene de superar al Mallorca (2-1) y, antes, lo hizo con el Albacete (1-0), Lugo (3-1) y Leganés (1-0). Entremedias solo se coló el emergente Girona para llevarse los tres puntos del estadio municipal ganando 0-3. Los aragoneses, con sus 10 triunfos en casa, encabezaban la tabla parcial de triunfos locales antes de iniciarse esta jornada junto con el Leganés (que ya lleva 11 al superar este sábado a la Ponferradina), el Oviedo y el propio Alcorcón.

A los blanquillos solo le han afeado el balance en La Romareda las cinco derrotas ante la afición aragonesa. Además de esa ante el Girona, ha acumulado aquellas por 0-1 ante Córdoba y Osasuna en septiembre, el 0-2 frente al Valladolid y el 1-2 contra el Mirandés. Este es el talón de Aquiles de los marcadores del Zaragoza en lo que va de liga. Para hacer un cotejo que ayude a comprender lo que supone este récord negativo sirve un simple dato: cinco derrotas en casa son las mismas que lleva, por ejemplo, el Llagostera, que lleva todo el año en la cola. O el Almería, también todo el curso hundido en el fango. Solo hay tres equipos que han perdido más partidos como locales que el Zaragoza: el Huesca (9), el Córdoba (8) y el colista, el Bilbao Athletic (7).

Pese a este contrapunto, las credenciales de unos y otros, en sus respectivos roles de local y visitante, otorga claramente el favoritismo al equipo zaragocista.