Wilk también tiene rota la rodilla
Al igual que Jaime, el futbolista polaco sufre una grave lesión en el ligamento cruzado anterior. En el mejor de los casos, permanecerá de baja durante seis o siete meses.
La lesión, en efecto, y tal como se temía en el Real Zaragoza desde la noche del pasado sábado, es muy grave: rotura del ligamento cruzado anterior. Tanto que le impedirá a Wilk jugar en los próximos seis o siete meses en el mejor de los casos, por lo que, al igual que Jaime Romero, se perderá casi toda la campaña.
El infortunio se ha cebado con el Real Zaragoza, esta vez, con un futbolista con cierta relevancia en el plan táctico adoptado por Ranko Popovic en el último mes. La noticia cayó como una bomba en el seno del club. Antes del mediodía, Wilk entraba al túnel de resonancias un poco antes del mediodía.
Pasadas las tres de la tarde, las pruebas fueron evaluadas por los profesionales médicos y se obtuvo un diagnóstico sobre la lesión del futbolista que poco después publicó el Real Zaragoza de forma oficial: "El jugador Cezary Wilk ha sido sometido en la mañana de este lunes a una resonancia magnética nuclear en el Hospital Quirón Zaragoza en la que se ha puesto de manifiesto una rotura de ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha".
En las próximas horas, los servicios médicos determinarán el lugar donde Wilk será sometido a una intervención quirúrgica para reparar el desgarro ligamentoso y establecerán las primeras pautas en la recuperación del futbolista polaco, con la idea de que inicie su rehabilitación cuanto antes. Wilk nunca ha sufrido una lesión de este tipo desde que llegó hace casi tres años a España.
En La Coruña, sí sufrió una dolencia que le mantuvo apartado de los terrenos de juego algunos meses en un dedo del pie, aunque fue consecuencia de una recaída.
Wilk se produjo la lesión de una forma desafortunada, como suele ser habitual en este tipo de acciones. Metió el pie para recuperar un balón a Mata, pero el delantero del Girona le golpeó justo en el momento más inoportuno, desestabilizando así la rodilla de Wilk.
Inicialmente, parecía que el futbolista polaco recibía el golpe abajo, en la zona del tobillo o el tendón de Aquiles, pero pronto se observó en el campo que el problema radicaba en la rodilla de la pierna derecha.
En apenas 20 días, el Zaragoza ha visto cómo se merma notablemente su plantilla con las graves lesiones de Jaime Romero y Wilk. Contra el Alavés, cayó Jaime, también con el ligamento cruzado anterior roto, un esguince en el ligamento colateral interno y rotura del menisco externo.
Además, este mismo mes, Adán Pérez, futbolista del Real Zaragoza cedido al Ebro, también ha sufrido una grave lesión de rodilla, con rotura parcial del ligamento cruzado posterior. Una dolencia que de momento no va a necesitar quirófano, pero que sí le va a apartar del fútbol algunos meses.
En total, tres jugadores profesionales del Real Zaragoza con las rodillas impedidas para jugar al fútbol durante una buena temporada.
