Víctor medita cambios

Busca dotar de más dinamismo defensivo al mediapunta y a los extremos.

Borja Bastón y Tato pelean por el balón
Víctor medita cambios
A. Alcorta

Sin pistas claras, sin exponer abiertamente una decisión firme –como sí hizo en otras ocasiones en semanas recientes–, VíctorMuñoz viene dejando muestras en los últimos días de que lleva en mente la introducción de uno o varios cambios relevantes en el once inicial clásico del último mes y medio.


Ayer, en el habitual partidillo de la antevíspera, el último que suele hacer a puerta abierta, destiló intenciones que afectan al segundo punta, a uno de los extremos y, en un aspecto de mayor calado, también a la composición numérica del medio campo. Es decir, la titularidad de Willian José ha podido dejar de ser indiscutible. Lo mismo que la plaza que Jaime le quitó a Álamo hace 10 días tampoco tiene dueño fijo ahora. Asimismo, la habitual doble composición de la línea de creación, con Dorca y Ruiz de Galarreta en el timón, es susceptible de incorporar un tercer miembro en cualquier momento.


Por un lado, Víctor Muñoz probó a Tato como mediapunta junto a Borja Bastón. Esa es la posición natural del delantero murciano que, poco a poco, va entrando en los planes del técnico. Por otra parte, la recuperación de Pedro después de dos meses de lesión en una rodilla, emerge como nueva solución a uno de los extremos. Pedro trabajó ayer por la izquierda del ataque, el mismo desempeño que ejecutó al principio de liga antes de caer lastimado en Barcelona. Su retorno al once parece cercano.


En ambas cuestiones, ayer perfiladas por Muñoz, subyace el apoyo defensivo que la gente de arriba ha de prestar a la retaguardia y que ni Willian José, en un caso, ni Jaime o Álamo, en el otro, están ofreciendo últimamente para desesperación de la zaga en momentos clave de los partidos.


Tato, como segundo punta, podría dar mayor dinamismo al puesto, ofrecer el mismo grado combinativo que Willian y, tal vez, aportar el gol en jugada que el brasileño aún no ha adjuntado en dos meses de titularidad. Pero, sobre todo, lo que se pretende es un mayor recorrido hacia atrás de esa pieza, algo que Willian no está mostrando por su propia idiosincrasia.


La figura de Pedro también gana enteros cada día que pasa. El alicantino, en las primeras jornadas, dejó muestras de una gran implicación en los repliegues y las coberturas al lateral de turno. Por el contrario, Jaime, pese a su calidad ofensiva y su aportación de gol, no rinde igual en el retroceso. Y Álamo, que sí es más aplicado cuando recula, tiene en contra su ceguera crónica ante las porterías rivales.


Muñoz, en los prolegómenos de la parte más dura del calendario, donde esperan los rivales más fuertes del torneo, está buscando alternativas a los errores manifestados en los últimos partidos. Yerros que, en la buena racha, fueron anecdóticos en medio de victorias y resultados positivos, pero que el lunes ante el Tenerife se convirtieron en nocivos al concluir con una dolorosa e inesperada derrota.


Como otros días, ayer Basha tuvo protagonismo en el simulacro. La inclusión de un tercer mediocentro en vez del mediapunta (Willian) que dé libertad a Galarreta es otra opción barajada.