Igualdad, pocas ocasiones y lógico empate sin goles entre Ebro y Castellón

Se topó el Ebro con un muro delante que fue imposible de derribar. El Castellón demostró por qué es el indiscutible rey del empate, con catorce igualadas, y como a los arlequinados les cuesta mucho sacar los partidos en casa, y la “x” suele ser un resultado habitual, que ambos sumasen un punto cotizaba a escaso valor en las casas de apuestas.

Precioso gesto de la plantilla arlequinada, que no quiso olvidarse de su compañero lesionado Tiago Portuga, al que le dedicaron una pancarta con muestras de afecto, en un momento en el que el jugador lo estará pasando mal, tras conocer que no podrá volver hasta el próximo curso. El propio Tiago agradeció el detalle, aplaudiendo y dando fuerza a la plantilla, que posteriormente no podría darle una alegría aún mayor.

Arrancó mejor el Castellón, que jugaba con fluidez, ante un Ebro al que le costaba encontrar la posesión. Dispusieron pronto los visitantes de un corner, que botaron abierto al primer palo, Gálvez remató, la pelota quedó suelta, pero el asistente levantó el banderín, con lo que la jugada quedó anulada. Probó Caballero a balón parado, pero en vez de colgar, lanzó directo a portería, sin fortuna alguna.

Pudo pronunciarse al fin el Ebro en ataque. Lo hizo con un centro de Sergio Cortés, que Álvaro Campos no blocó, y la pelota suelta tuvo que despejarla Regalón para evitar males mayores. Fue también Sergio Cortés el que obligó al meta a sacar una manopla para enviar a saque de esquina, en una ejecución de falta.

El ritmo era calmado, monótono incluso. Lo buscó romper Víctor García, con una internada hasta la cocina. Buscó el centro, pero la defensa había tapado todos los agujeros, y la acción finalizó con el cuero en el banderín de esquina.

Consulta el resto de crónicas de Segunda División B

Quiso darle una punta mayor de velocidad a las acciones el cuadro arlequinado, que dio motivos para la esperanza. Chutó desde lejos Dani Martínez y entre Sergio Cortés y Víctor García montaron una combinación, pero en ambas veces se encontraron con la buena respuesta de Álvaro Campos.

El siempre perjudicial aire quiso tener su porción de protagonismo, y acompañó el segundo periodo, justo en la dirección donde el Ebro debía defender. Otra molestia más a la que ya estaba presentando el rival.

Manolo González empezó a mover el banquillo en busca de soluciones. Se fueron unos casi inéditos Sandro y Nierga, para dar paso a Javi Cabezas y Raúl.

Ya que de jugada era imposible derribar a la zaga castellonense, tocó intentarlo desde lejos, y ahí apareció por partida doble la poderosa zurda de Víctor García. En primer lugar, lanzó abajo, atrapando el cancerbero, para poco después, en lo que fue la ocasión más clara, probar con toda la maldad del mundo, haciendo que el balón botase cerca de la portería y saliendo ajustado al palo diestro. Respondió el Castellón con la calidad de Jamelli. Cuando el medio entra en contacto con la pelota, las cosas cambian de color. Entrando desde atrás remató, pero se le fue alto.

En el descuento, contrataque vertiginoso del Ebro tras falta a favor de los visitantes, pero en el momento de dar el pase que hubiera puesto solo a Sergio Cortés ante el meta, Javi Cabezas no precisa y todo acaba en nada.

Resultado inamovible que dio la impresión que hubiese sido el mismo aunque el choque se hubiera alargado más horas. Lo mejor, un punto más que permite seguir invicto en el 2019.

Ficha técnica:

Ebro: Salva, Luca Ferrone, Teo Tirado, Michele, Ubay, Gerrit, Dani Martínez (Fode, 72), Sandro (Javi Cabezas, 57), Nierga (Raúl, 57), Sergio Cortés y Víctor García

Castellón: Álvaro Campos, Muguruza, Regalón, Carlos Delgado, Satrústegui, Ramos (Julio Delgado, 86), Jamelli, Caballero, Gálvez, Cubillas y Jairo Cárcaba (César Díaz, 69).

Árbitro: Etayo Herrera (Comité vasco).  Amonestó a los locales Gerrit, Ubay y a Sergio Cortes y al visitante Caballero.

Más información del deporte regional en la web de Afición