Al Ebro le sale todo al revés y encaja una dura derrota
El colegiado dejó al Ebro con uno menos por una acción que no mereció ese castigo.
Otro día desgraciado, en el que todos los elementos estuvieron en contra, trajo como consecuencia un nuevo disgusto. No hay manera de amarrar los puntos en casa, esos que son más vitales si cabe.
El primero de los contratiempos iba a llegar en una entrada en plancha de Hugo Díaz a Ubay, que le costó tener que retirarse al central. No iba a tardar mucho el Atlético Baleares en adelantarse, en un magnífico balón en profundidad de Marcos a Hugo Díaz, que supera a Salva con una vaselina con la pierna izquierda.
Al Ebro le pesaba como una losa todo lo que estaba sucediendo, que se añadía a todo lo acumulado durante la temporada y costaba un mundo enlazar pases seguidos en la zona de ataque. No fue hasta el minuto 25 cuando el Ebro pudo trenzar una jugada de mérito, con un centro de Dani Martínez que cabeceó mansamente Raúl.
La mañana iba de mal en peor. Jon Ander y Liñán chocaban de manera brusca sus cabezas en una acción en la que no se avisaron y los dos fueron a disputar un mismo balón aéreo. El juego se reanudó a pesar de estar los dos futbolistas atendidos en la banda. El lateral regresó al terreno con un llamativo gorro de baño como método de sujeción para las vendas colocadas, aunque tocado, lo que le costó posteriormente tener que ser suplido.
El juego no tenía nada de fluidez, y si mucho espesor. Los continuos parones entre faltas y atenciones a los jugadores, imposibilitaban ver nada destacable aunque Sergio Cortés rompió la monotonía, encontrando un pasillo por donde colarse y la defensa lo mandó al suelo en una clara falta en la corona del área. La oportunidad era apetitosa, pero Víctor García ejecutó con un disparo blando a más no poder.
Por si el cartucho de adversidades no estuviera suficientemente manido, iba a llegar una increíble expulsión por doble amarilla de Liñán, en una falta que no mereció nada más que ser señalada como tal, en una aplicación del reglamento muy dispar a unos y otros, pues los que más faltas estaban haciendo, los baleares, se iban de rositas, el Ebro se quedaba con 10 sin pegar una patada de más.
El equipo tuvo los arrestos suficientes para sacar coraje al verse con uno menos de manera injusta y en una triangulación muy buena entre Sergio Cortés, David Mainz y Rodrigo, éste último empataba, teniendo solo que empujar.
Pero como este año al Ebro el refrán del perro flaco y las pulgas se le está quedando corto, después de hacer lo más complicado, se perdía un balón sacándolo desde atrás y Tiago Portuga derribaba a Nuha en el área. Penalti claro que Fullana ejecutaba fuerte y centrado, batiendo a un Salva que se había vencido hacia su derecha. Dos minutos más tarde, la sentencia, en un jugadón de Fullana, que se va de Michele con un quiebro de nivel y ante la finaliza por alto de manera perfecta.
Ahí se acabó todo. El resto fue pedir que se acabara todo lo antes posible, aunque Rodrigo, en el descuento, pudo reducir distancias, tras hacer un control sensacional, pero definiendo muchísimo peor.
Ficha técnica:
CD Ebro: Salva, Jon Ander (Rodrigo, 46), Luca Ferrone, Michele, Ubay (Sandro, 5), Liñán, Víctor García, Dani Martínez (David Mainz, 52), Raúl, Sergio Cortés y Tiago Portuga.
Atlético Baleares: Carl, Quique (Expósito, 69), Biel, Vallori, Álvaro Vega, Villapalos, Rovirola, Marcos, Nuha (Ortiz, 80), Fullana y Hugo Díaz (Adrián, 60).
Goles: 0-1, min. 8: Hugo Díaz. 1-1, min. 68: Rodrigo. 1-2, min. 72: Fullana, de penalti. 1-3, min. 75: Fullana.
Árbitro: Carrero Romera (Comité catalán). Amonestó a Javi Cabezas, estando en el banquillo, Sergio Cortés y Rodrigo por parte local y a Fullana, de los baleares. Expulsó a Liñán por doble amarilla en el minuto 56.
