baloncesto
Zaragoza se vuelca con la selección española
España se enfrenta a Letonia (20.00), en un partido para el que ya no quedan entradas. Rudy Fernández es baja de última hora.
El pabellón Príncipe Felipe se viste esta noche de gala para ver cómo la selección española de baloncesto inicia la defensa de su título como vigente campeona de Europa. España se enfrenta a la temible Letonia –selección que le propició un inesperado revés en el último Mundial–, en un partido en el que la afición zaragozana tratará de llevar al equipo en volandas, dado que habrá llenazo en las gradas: las más de 10.000 localidades que salieron a la venta ayer ya estaban agotadas.
Sergio Scariolo se presenta a la cita con una sorprendente convocatoria en la que destaca la presencia de tres aragoneses (Carlos Alocén, Jaime Pradilla y Lucas Langarita, este último como invitado por lo que no disputará el partido) y el regreso de Ricky Rubio, que lleva meses sin pisar las canchas, pero que hoy «seguro que tendrá minutos», según avanzó ayer el seleccionador. Scariolo también informó de que Rudy Fernández será baja de última hora por una «pequeña lesión» («nada serio, pero no vamos a asumir riesgos»), que le impedirá también estar presente el domingo en Bélgica en el segundo partido de estas ventanas clasificatorias para el Eurobasket de 2025.
¿Qué se espera del partido de esta tarde? Presumiblemente será un encuentro muy disputado porque Letonia es un equipo con un gran tiro exterior y con una defensa férrea. El conjunto báltico se encuentra actualmente en la octava posición del ranquin de la FIBA (España es tercera), pero la proyección del combinado que capitanea Dairis Bertans es incontestable, tras ascender 22 puestos después de su actuación en la Copa del Mundo.
Minutos y confianza
Los cuatros días que lleva España en Zaragoza han servido para preparar jugadas, pero Scariolo también advirtió ayer de que sus jugadores han tenido que aprenderse los sistemas y asimilar «mucho contenido en poquísimo tiempo».
El técnico de Brescia, que a comienzos de temporada fue destituido de la Virtus de Bolonia, dijo estar «con muchas ganas» de tomar de nuevo el timón de la selección y, de hecho, insinuó que ha tenido que aplacar su exceso de energía «para no sobrecargar ni a los jugadores ni al cuerpo técnico, que son las víctimas de cuando uno tiene demasiadas ideas». Scariolo afirmó que esta convocatoria es una oportunidad para muchos deportistas «que están jugando poco», como es el caso de Juancho Hernangómez, pero también del propio Carlos Alocén o, incluso, de Alberto Abalde o Darío Brizuela.
La presidenta de la Federación Española de Baloncesto (FEB), Elisa Aguilar –que sucedió el pasado octubre a Jorge Garbajosa– insistió ayer en que «la mejor noticia» desde que está en el cargo es «el regreso de Ricky Rubio» a la competición, al mismo tiempo que reconoció que fue «una de las personas más felices del mundo» con la reciente clasificación para París 2024 de la selección femenina, con una grandísima actuación de la jugadora del Casademont Mariona Ortiz.
Ayer por la mañana, entre ruedas de tiro y la puesta en práctica de algunos sistemas tácticos, la selección también sacó unos minutos para recibir al presidente de la Comunidad, Jorge Azcón, y la alcaldesa Natalia Chueca, que departieron con los jugadores (hicieron un aparte con los aragoneses), se llevaron sendas camisetas con sus nombres y desearon suerte quienes hoy verán anotar (ojalá que con gran acierto) desde el palco de un Príncipe Felipe lleno hasta la bandera.
