fútbol sala
Un firme Wanapix Sala 10 se lleva el derbi aragonés con justicia
El equipo de Jorge Palos exhibe solidez defensiva y pegada para doblegar por 4-1 al Full Energía.
Los aficionados al fútbol sala ya tienen su regalo anticipado. El derbi aragonés fue este sábado una fiesta dentro de las fiestas. Un partido emocionante -más que vistoso- que se acabó llevando el Wanapix Sala 10 ante las 1.500 personas que acudieron al pabellón Siglo XXI y volvieron a disfrutar con los dos máximos exponentes de este deporte en la Comunidad.
Existe una rivalidad sana. Todos se conocen demasiado. Tanto, que el respeto entre ambos marcó el inicio del inicio del encuentro a pesar de los goles. A pesar del 0-1 anotado por el Full Energía en una rápida jugada en la que Tabuenca rompió líneas y cedió a Muniesa para que batiera a Iván Bernad a la media vuelta; y del 1-1 del Wanapix, que tuvo a Alberto Inés como autor de la igualada.
Los locales dominaban el juego, pero los azulones, al margen de ese despiste puntual, en el que Inés se anticipó a Tabuenca y le ganó un rechace, no sufrían en defensa. Se arropaban atrás para luego salir con transiciones rápidas.
Como esa contra en la que Iván Romero aguantó el balón hasta cedérselo de cara a Jorge Tabuenca, que hizo intervenir a Iván Bernad, u otra acción más elaborada en la que Marcos Forga amagó hasta dejársela a Manu Cebrián, que finalizó con un chut tan potente como desviado.
Primaban las precauciones entre ambos equipos. Había poco espacio para la improvisación, hasta que apareció Adrián Rivera con una jugada individual sobresaliente, en la que se valió de una sobreposición en tres cuartos de cancha para avanzar y sacar un punterazo seco, arriba, inapelable para Fer.
El Wanapix se adelantaba a dos minutos para el descanso. Y la renta pudo ser mayor si Retamar llega a aprovechar otra contra a pocos toques, en la que erró en la definición justo antes de que el Full Energía dispusiera de las dos últimas oportunidades de la primera mitad, por medio de Muniesa y de Romero.
Los locales estaban siendo ligeramente superiores. Y esa sensación se prolongó en la reanudación. A los de Jorge Palos les duraba más el balón. Circulaban con más claridad, y no sufrían para controlar las réplicas de su rival, fundamentadas en los envíos largos hacia Muniesa.
Así transcurrieron los primeros cinco minutos de la segunda mitad. Y no fue hasta el 26, con sendas acciones individuales de Pescio y Fran Tabuenca, una por cada bando, cuando el encuentro comenzó a animarse.
El Full Energía, que hasta entonces no había tenido prisa, apretó. Hubo un tramo -del 30 al 34, aproximadamente- de asedio, bien resuelto por Bernad. Y cuando le metió un punto más de atrevimiento, con Fernandito saliendo de su marco para generar superioridades, Alberto Inés castigó un error del guardameta para firmar el 3-1 con un sensacional tiro desde su propio área.
Restaban cinco para el final. A los visitantes no les quedaba otra que seguir atacando de cinco, pero les faltó algo de frescura -y de ideas- en sus ataques en posicional. La oportunidad más clara fue un punterazo de Jesús Preciado que fue rechazado -¿por quién si no?- por Iván Bernad.
Y el propio guardameta fue el que cerró el partido a falta de solo 20 segundos, con otro tanto de campo a campo. Con el golpe definitivo de un equipo que llevó el derbi con justicia, gracias a su solidez defensiva y una pegada que este sábado tuvo como principal protagonista al joven Alberto Inés. Doblete para un 4-1 que mantiene al Wanapix en lo alto de la tabla, acechando el liderato del Antequera.
