El entrenador del Manchester United, José Mourinho, provocó a la afición y los jugadores de la Juventus de Turín al ganar en el último minuto (1-2) en la cuarta jornada de Champions League, señalándose la oreja pidiendo a la grada de los italianos que siguieran jaleándole después de haber sido remontados por su equipo.

Mourinho saltó al césped a la conclusión del encuentro y se llevó la mano a la oreja. Hecho el gesto, fue abordado por Bonucci y Dybala, que le pidieron explicaciones a su provocación. El extrenador del Real Madrid continuó con su gesto haciendo caso omiso a las palabras de los futbolistas y cuerpo técnico del conjunto local.

El momento de euforia de Mourinho vino precedido por la remontada del United al gol inicial de Cristiano Ronaldo. Juan Mata puso las tablas en el marcador por medio de una falta directa y Álex Sandro, lateral diestro de la Juventus, se metió en propia el 1-2 final.

La explicación de Mou

Mourinho admitió que con la mente fría no haría ese gesto aunque subrayó que fue insultado "los 90 minutos". "Me insultaron durante los 90 minutos y vine aquí para hacer mi trabajo, nada más. No ofendí a nadie, solo hice el gesto que quería escuchar algo más", afirmó el polémico técnico.

"Si hubiera estado frío no lo habría hecho, pero solo vine para hacer mi trabajo y la gente insultando a mi familia y a la interista, eso no es bueno y reaccioné de esa manera", prosiguió el portugués, considerado como un "enemigo" por la afición del Juventus a causa de su pasado al mando del histórico rival Inter.

"Nuestro partido fue de alto nivel, jugamos al máximo nivel. No podemos ser mejores que esto. Ganamos contra un equipo que juega con objetivos distintos que los nuestros a todos los niveles. La victoria fue una suerte que buscamos, porque hicimos un partido muy positivo", reconoció.