Cargol: "Queremos que la afición del Tecnyconta se sienta orgullosa de su equipo"

El Tecnyconta ya ha cerrado la plantilla de la próxima temporada. Se ha trabajado con rapidez y convicción.

Han sido muchos meses de trabajo. La idea era estar preparados y en las mejores condiciones para comenzar el día 20 la pretemporada. De momento tenemos ya una plantilla; el reto es convertir esa plantilla en un equipo, y ahí empieza ahora el trabajo del entrenador y del resto del cuerpo técnico.

El resultado es, a priori, un grupo equilibrado, competitivo y solvente.

Hemos tratado de agrupar diferentes cosas a la vez. Por un lado queríamos jugadores con veteranía y experiencia, con un amplio conocimiento de la competición. Al mismo tiempo, buscábamos gente que tuviera hambre, deseo, ambición, ganas de mejorar; una actitud que, precisamente, representa una de las señas de identidad de nuestro club. Y además, también hemos incorporado a jóvenes con espacio para crecer. Sobre estas premisas hemos trabajado.

Un equipo que transmita, que contagie a la grada.

Sin duda, es una de nuestras ilusiones: que la marea roja se identifique con el grupo, con el trabajo y el esfuerzo de los jugadores; que la afición se sienta orgullosa del equipo. Queremos conseguir esa comunión con la grada, haciendo honor a nuestra idea de familia y siendo partícipes todos de nuestro lema ‘Siente Zaragoza’.

¿Se ha manejado el mismo presupuesto que en el curso anterior?

Sí, en este sentido hemos trabajado en la misma línea que la pasada campaña.

¿Qué aspectos destacaría del juego interior?

Es una mezcla. El primer jugador que fichamos fue Radovic, que puede tener mucho crecimiento, que conoce muy bien la ACB, que ha sido capaz ya de competir a muy buen nivel en el Murcia y en el Obradorio, pero que tiene aún muchísimo margen de crecimiento. Con estas características, ahora se une a un jugador como Fran Vázquez, quien tiene un conocimiento total de la Liga, que tiene experiencia, veteranía y prestigio, además de mucho peso dentro de la competición. Lo mismo sucede con el resto.

Justiz, Marc y Nacho Martín.

Complementando todo lo anterior, Justiz es un jugador en crecimiento, con un potencial físico importante y que viene con hambre y ambición. Cumple con el perfil que buscábamos para la posición de pívot: que fuera capaz de jugar el bloqueo directo y de continuar fuerte al aro. Aspectos que tanto él como Fran Vázquez ejecutan a la perfección. Por su parte, Nacho nos da la posibilidad de abrir el campo, por su capacidad de tiro, al margen de su experiencia. Y Marc, que ha jugado cedido en el Lleida pero que se ha formado con nosotros, tendrá esa competencia para ayudar al equipo y para seguir creciendo.

¿Y en el perímetro?

Nos hemos basado en la misma idea de combinar experiencia y juventud. Y#en el juego exterior también disponemos de distintos estilos y posibilidades de ataque. Seibutis, por ejemplo, es capaz de jugar con bloqueo directo, de generar con el balón en las manos y de amenazar con su tiro. Hablamos de un jugador con una contrastada experiencia en el baloncesto europeo y que llega, además, en un momento de madurez muy importante. Mientras, Okoye viene de competir muy bien en Italia, y nos dará ese componente físico que será el complemento ideal al estilo de Seibutis. Nos puede ayudar mucho por su capacidad atlética, su habilidad para correr el contragolpe, su presencia física, su intensidad defensiva y su facilidad para acudir al rebote. Junto a ellos, contamos con dos jugadores en crecimiento.

Se refiere a Barreiro y a Berhanemeskel.

En el caso de Barreiro, ya dio un importante paso adelante el pasado año, demostrando que tiene muchas ganas de crecer. Es un alero grande, con una gran presencia física, que cumplirá ahora su tercera temporada con nosotros. Por su parte, Berhanemeskel tiene otro estilo. Ha completado un buen año en Alemania. Es capaz de correr los bloqueos y con una gran capacidad de tiro. Con Okoye, Seibutis, Barreiro y Berhanemeskel, contamos con cuatro maneras de atacar distintas que nos darán versatilidad. Ahora es el técnico quien tiene que darle forma a todo esto.

¿Y los bases?

Los mismo que todo lo anterior. Bo McCalebb, por su experiencia, sin duda nos vendrá muy bien como referente y como punto de crecimiento de Alocén y Santana. Cuando supimos de la lesión de Schaffartzik, enseguida nos pusimos a trabajar y, en ese momento, surgió la posibilidad de contar con Bo. Él también tenía muchas ganas de volver, de darle a Zaragoza el baloncesto que atesora.

También el técnico, Porfirio Fisac, es un valor seguro.

Cumple con las características que buscábamos para el banquillo: experiencia, que conociera la competición, que venir a Zaragoza le supusiera un reto, que tenga ganas de crecer... Esta temporada, el reto que tenemos todos es crecer. Y Porfirio conoce el camino.

Alocén y Marc, con su salto definitivo a la primera plantilla, evidencian el acertado trabajo del club en sus categorías inferiores.

Tratamos de dar oportunidades a quienes se lo ganen, siempre sin olvidar que queremos competir y ganar. La intención es que todos los canteranos se encuentren con las condiciones necesarias para crecer, que tengan el mejor escenario para desarrollarse y evolucionar. Ahora han subido Alocén y Martí, pero jóvenes valores como Jaime Pradilla, Javi García, Ander Urdiain, Raúl Lobaco y Vit Krejci van a estar muy vinculados al primer equipo. Vienen empujando con fuerza y se hallan a uno o dos pasos de estar arriba.

La marcha de Jaime Fernández al Barcelona, después de formarse en la cantera desde categoría infantil, sí que supone un revés considerable en este sentido.

Creemos firmemente en lo que hacemos, en nuestro trabajo de cantera. Es nuestra filosofía y, sin duda, vamos a seguir apostando con decisión por nuestros jóvenes valores. Nuestra función es hacer que crezcan, que desarrollen su talento. Lo que pase después ya no depende de nosotros.

Quien no renovó fue Gary Neal.

Nosotros le presentamos una oferta en su momento, pero él decidió esperar. Así que continuamos con nuestro cometido, que era configurar un equipo para la temporada. Eso sí, le estamos muy agradecidos por todo lo que nos dio y, por supuesto, le deseamos lo mejor para el futuro.