El nuevo ministro de Cultura y Deportes, Màxim Huerta, no pasó desapercibido este domingo en la final de Roland Garros. Ataviado con un sombrero tipo borsalino, consideró que Rafael Nadal "es España", porque "representa los mejores valores de este país". El ministro recordó que hace veinte años él ya había estado en Roland Garros, apoyando entonces a Álex Corretja, con unos amigos con los que "vinimos a disfrutar de este gran espectáculo que es todo lo que envuelve a las pistas", señaló, en una ciudad, además, con la que el ministro guarda fuertes vínculos personales. "Vi varios partidos en pistas pequeñas. Fue maravilloso en lo emocional, y, desde el punto de vista político, ahora lo es apoyar a Rafa, es reafirmar la pasión por el deporte", agregó.