Luis Arbalejo dimite como responsable de la cantera del Tecnyconta

El El técnico, que se incorporó en 2013, abandona el club por motivos personales. Jorge Samper será su sustituto hasta junio.

Luis Arbalejo, en una de las pistas anexas del pabellón Príncipe Felipe.
Luis Arbalejo, en una de las pistas anexas del pabellón Príncipe Felipe.
Guillermo Mestre

Luis Arbalejo presentó este martes su dimisión como máximo responsable de la cantera, lo que supone un contratiempo mayúsculo para el Tecnyconta Zaragoza. De hecho, el club pierde a una de las piezas más cotizadas del baloncesto nacional, a un pilar fundamental en su proyecto deportivo. Este sentido, existe un dato irrebatible: el técnico se incorporó a la entidad en 2013, cuando sólo había dos jugadores en las categorías inferiores de la selección; y en la actualidad, la nómina de internacionales supera la decena, con Carlos Alocén como principal exponente.

Arbalejo, que abandona el cargo por motivos personales, contaba con el respaldo de todos los entrenadores de la cantera. Al margen su facilidad para detectar el talento, el técnico domina todos los aspectos del baloncesto formativo, cuenta con conocimientos tácticos muy elevados y se ha distinguido siempre por su entusiasmo, por su carácter inconformista y su afán por mejorar. Mientras la entidad encuentra un sustituto para Arbalejo, Jorge Samper (entrenador del equipo cadete) ejercerá de coordinador de la cantera hasta el final de la presente temporada.

En sólo cinco años, Arbalejo ha situado al club zaragozano entre las mejores canteras del panorama nacional. Su implicación ya resultó decisiva, en el verano de 2013, para la incorporación de Sergi García a las categorías inferiores del club. El base, que firmó con los zaragozanos en edad cadete, protagonizó un crecimiento espectacular y era, en la presente campaña, el indiscutible guía espiritual de la plantilla aragonesa. Sergi, sin embargo, optó por marcharse al Valencia el pasado mes de noviembre, tras abonar los 350.000 euros de su cláusula de rescisión. Arbalejo también intervino en la contratación de Barreiro, quien debutó recientemente con la selección absoluta; y obligó a que el Simply Olivar, filial del Tecnyconta en la Liga EBA, sólo tuviera en nómina a juveniles, quienes compiten asiduamente con jugadores cuajados, bregados y experimentados.

El técnico siempre ha trabajado bajo una consigna inquebrantable: anteponer la progresión del jugador a la obtención de resultados inmediatos. Porque hay dos modos de entender la cantera: la que persigue la victoria inmediata de sus equipos –una inclinación hacia jóvenes acelerados en sus capacidades físicas–; y, por el contrario, la que busca la óptima formación del jugador con objetivos a largo plazo. En esta última opción, lo que prima es el talento. Por ello, Arbalejo no fichaba al más alto, ni al más fuerte, ni al más potente, ni al más poderoso de su generación –lo que le hubiera garantizado victorias inmediatas–; sino al que mejores condiciones tenía –habilidad, ingenio, aptitud– para acceder a la élite a largo plazo.

El resultado es incuestionable. El Tecnyconta cuenta con algunas de las mejores promesas del baloncesto nacional. En 2016, ningún otro club aportó tantos jugadores a las divisiones inferiores de la selección: hasta 14 internacionales. Y en la actualidad, además de Marc Martí y Álvaro Sanz (cedidos en la Liga LEB), las categorías inferiores de España cuentan con Carlos Alocén, Jaime Fernández, Javier Fernández, Jaime Pradilla, Aday Mara, Álvaro Martínez y Lucas Langarita, mientras que Vit Krejci compite con la República Checa. Y eso que se marcharon, por la limitaciones económicas de la entidad, otros internacionales como Bernacer, Pursl, Nesic, Dolezaj y Verners Kohs.

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