Cargol amplía las rotaciones

Desde el inicio de la temporada, las actuaciones del Tecnyconta presentaban un denominador común: la escasa productividad de sus jugadores de banquillo. Un factor que condicionaba drásticamente el rendimiento del equipo zaragozano, que se desplomaba sin remisión en los últimos compases de los partidos, con los titulares ya exhaustos, tras haber realizado un desgaste formidable con anterioridad. Antes del partido ante el Obradoiro, hasta cuatro jugadores promediaban más de 25 minutos por duelo: Gary Neal, Tomás Bellas, Bo McCalebb y Nikola Dragovic. Con la destitución de Jota Cuspinera, consumada el pasado 30 de enero, se ha modificado el escenario y el equipo presenta ahora una mayor profundidad de banquillo.

Pep Cargol, en este sentido, ha trasladado un mensaje categórico a los jugadores: en el recorrido hacia la salvación, que se antoja arduo y laborioso, necesita de la implicación de todos los componentes de la plantilla. Y en el duelo ante el Obradoiro, en un choque vital para las aspiraciones del Tecnyconta, el entrenador catalán ya dio sobradas muestras de sus intenciones:amplió las rotaciones de la plantilla y, entre otros aspectos, concedió minutos importantes a Michalak y Triguero, quienes venían desempeñando un papel residual desde el inicio de la competición, además de aumentar el protagonismo de Nicolas de Jong.

Michalak, que había emitido señales muy positivas durante la pretemporada, fue perdiendo protagonismo conforme avanzaba el torneo. Ante el Fuenlabrada y el Bilbao, apenas jugó dos minutos; contra el Joventut y el Burgos, ni siquiera saltó a la pista; y hace sólo 15 días, en el partido ante el Herbalife, su participación se redujo a los primeros cinco minutos de la contienda. En principio vino para reforzar la demarcación de escolta, aunque los posteriores fichajes de Janis Blums y Gary Neal le desplazaron a la posición de alero, donde no se desenvuelve con la misma convicción. Pese a todo, se esperaba mucho más de Michalak, cuyo rendimiento se halla muy por debajo de su verdadero potencial.

Ahora, Cargol se ha propuesto recuperar la mejor versión del polaco, a quien dio un voto de confianza en el choque del pasado domingo, ante el Obradoiro, en un encuentro determinante para el devenir de los zaragozanos. Michalak actuó durante 12 minutos, con una contribución de 4 puntos, 3 rebotes, 1 asistencia y 1 recuperación de balón.

También Triguero gozó de mayor protagonismo a las órdenes de Pep Cargol, quien optó por jugar con dos pívots en determinadas fases del encuentro. El valenciano, que sólo había participado en nueve partidos en el presente campeonato, permaneció en la pista durante 12 minutos y cumplió con creces con su cometido. Al margen de su desempeño defensivo, Triguero anotó 4 puntos –con 2 de 2 en sus lanzamientos–, además de aportar 1 rebote y 1 asistencia.

Otro jugador recuperado para la causa es Nicolas de Jong, quien asumió más responsabilidad que en anteriores partidos, sobre todo porque el Tecnyconta fue capaz, por fin, de dotar de balones a la pintura. El holandés se mantuvo en la pista durante 22 minutos, con unos registros de 9 puntos, 6 rebotes, 1 asistencia y 1 recuperación.

Por el contrario, Mazalin y Blums siguen sin dar un paso adelante en su rendimiento. El croata, de 20 años, fue contratado como un proyecto de futuro tras presentar guarismos muy interesantes en las últimas campañas, pero no ha aportado nada desde su incorporación al cuadro aragonés. El pasado domingo se quedó nuevamente sin jugar. Y en el caso del letón, un jugador con una amplia experiencia en el baloncesto europeo, su sorprendente desatino responde a su propia ansiedad, a su falta de templanza y sus malas selecciones de tiro. Ante el Obradoiro, Blums volvió a precipitarse en cada una de sus acciones y, por segundo partido consecutivo, se quedó sin anotar.