Victoria Luengo: "Las mujeres inteligentes despiertan muchas sospechas"

Estrena este jueves 'Reina Roja', la adaptación del 'bestseller' de Juan Gómez-Jurado, donde encarna a Antonia Scott, una mujer con un cociente intelectual de 242.

La actriz Vicky Luengo en la premiere de la serie 'Reina Roja' en la que interpreta a la protagonista, Antonia Scott.
La actriz Vicky Luengo en la premiere de la serie 'Reina Roja' en la que interpreta a la protagonista, Antonia Scott.
E. P.

La de Victoria Luengo (Palma de Mallorca, 33 años), flamante Premio Princesa de Girona Arte 2024, puede parecer una carrera meteórica, pero no hay en su trayectoria un golpe de suerte, sino un trabajo constante y concienzudo a la hora de encarnar a todo tipo de mujeres desde la verdad. Deslumbró a los espectadores cuando encarnó a la agente Laia Urquijo en la miniserie 'Antidisturbios' (Rodrigo Sorogoyen, 2020), se ganó una nominación al Goya a mejor actriz por dar vida a Helena en 'Suro' (Mikel Gurrea, 2022) y, sobre las tablas de los escenarios de media España, continúa maravillando al público en 'Prima Facie', un monólogo en el que da vida a una abogada encargada de defender a violadores que ya le ha granjeado un Fotogramas de Plata. Hoy está de estreno: 'Reina Roja', adaptación del bestseller de Juan Gómez-Jurado, llega a Prime Video. En ella da vida a Antonia Scott, la mujer más inteligente del planeta, con un cociente intelectual de 242. Ella y el policía Jon Gutiérrez formarán, a regañadientes, pareja para tratar de dar caza a Ezequiel, un asesino que tiene secuestra a la hija de un importante empresario español.

Del 1 al 10, ¿cómo de nerviosa está con el estreno?Uff, no mucho, es muy raro. Te diría 5, la verdad. Estoy bastante tranquila. De hecho, ayer en la 'premiere' que hicimos, estaba sorprendida de lo poco nerviosa que estaba.

¿Suele abstraerse cuando llega un estreno de estas características?No, a ver, abstraerme creo que es imposible. A todos nos gusta que nuestro trabajo llegue al mayor número de gente posible y guste, ¿no? Pero en el caso de 'Reina Roja', tengo la sensación de que es tan grande que es imposible que yo lo pueda controlar y gestionar, así que estoy contenta, esperando que guste, pero viéndolo un poco desde fuera, como si lo viera otra persona.

Su nombre y el de su compañero de reparto, Hovik Keuchkerian, estuvieron siempre encima de la mesa para dar vida a Antonia y a Jon. ¿Qué le sedujo del proyecto?Pues fueron varias cosas. Para empezar, es una cosa muy poco habitual entrar en un proyecto que tiene toda esa visibilidad y expectación desde antes. Creo que era una oportunidad bonita para trabajar en algo grande y un reto. Después me gustó el personaje, una mujer compleja, poco convencional y que tiene algo como de cómic. Me parecía muy difícil e interesante. Por último me gustó la idea de grabar cosas de acción, de permitirme, como actriz, acercarme a un universo no tan realista, que no tuviera tanto que ver con la verdad y con una cosa más intimista, que es lo que estoy acostumbrada a hacer en 'Suro', en 'Antidisturbios', en 'Prima Facie'... Todo está muy ligado a la verdad, al realismo, a la oscuridad, y esto me pareció más luminoso, había comedia.

"Es imposible gustarle a todo el mundo"

¿Se había zambullido ya en el universo de Juan Gómez-Jurado o fue a raíz del proyecto?Fue a raíz del mismo. O sea, yo la primera vez que me leí un libro suyo fue porque me contactó mucha gente a través de las redes sociales diciéndome que me parecía a Antonia Scott y yo no sabía quién era (ríe). Al final le escribí a Juan y le dije: "Oye, todo el mundo me compara con esta señora. Yo no sé quién es. No te conozco tampoco, pero voy a leerme los libros a ver de qué me están hablando". Y ahí fue cuando empecé a descubrir el proyecto y la novela. Cuando la terminé, le escribí a Juan y le dije que me parecía que el personaje era muy chulo y que realmente si existiera el audiovisual sería genial hacerlo. Entonces, me lo ofreció.

Antonia Scott es un personaje muy querido, con millones de seguidores en medio mundo. ¿Siente un poco el peso de la responsabilidad?No... a ver, en un lugar sí que lo sentí, pero no pensé mucho en ello, la verdad. Creí que si yo me hacía responsable y pensaba mucho en ello, se iba a convertir más en un peso que en algo para disfrutar. Es imposible gustarle a todo el mundo, no voy a llegar a eso por mucho que me empeñe, así que decidí soltar esa presión y no poner el foco ahí.

Decía antes que le ha permitido rodar acción y con un croma detrás. ¿Qué es lo que más le ha sorprendido del proceso?Darme cuenta cómo el equipo de VFX ha acabado mi trabajo. La mitad de mi trabajo lo han hecho ellos, poniéndome todos esos efectos que han logrado que mi trabajo sea mejor. Y luego me ha sorprendido también lo que se tarda en rodar estas cosas. Yo no sabía que había que dedicar un plano para cada vez que hay que hacer un efecto. Se necesita mucha paciencia y mucha precisión.

¿Cómo se preparó para encarnar a un personaje tan distinto?Pues me puse como reto alejarme del cliché de lo que yo tenía en la cabeza que era una persona inteligente e intentar acercarme realmente a lo que significa tener altas capacidades, vivirlo y entender lo que era y ver cómo estas personas conviven con su día a día. A partir de ahí, pues hablé mucho con Juan, entendiendo qué es lo que quería enseñar de Antonia. Una vez entendí todo eso, hice mi propuesta.

¿Llegó a hablar con personas con este tipo de capacidades?Sí, hablé con dos personas y me ayudaron mucho. Les estoy muy agradecida y de hecho les cogí ciertas cosas como algunos gestos o algunas cosas que me sirvieron para construir al personaje mejor.

Al principio de la serie, Antonia Scott se muestra más hierática, más encerrada en sí misma y menos emocional. sí misma, más hierática. Dar vida a alguien que transmite menos emociones, ¿es más fácil o más difícil?Pues depende. Hay veces que te diría que es más difícil porque las emociones que tienes que gestionar pues son más complicadas y tal, pero por otro lado también hay una parte fácil, al tener unos rasgos tan marcados, cómo de tener un ancla, algo a lo que agarrarse siempre, y eso facilita mantenerte en el personaje y no perderlo.

Uno de los grandes hallazgos de la novela de Gómez-Jurado es que ni Jon ni Mentor se ven amenazados por la inteligencia de Antonia, sino que la aceptan con naturalidad, cuando tradicionalmente la ficción ha asociado la inteligencia femenina a la maldad, a las femme fatal. ¿Por qué cree que se ha tratado siempre así? ¿Cree que está cambiando?lo mejor las mujeres inteligentes antes daban más miedo, pero yo lo que noto ahora es que una mujer inteligente despierta muchas sospechas y comentarios como de "uy, ¿esta persona qué querrá?". Como si detrás de la inteligencia femenina tuviera que haber un propósito o un objetivo, como si la inteligencia femenina sirviera en concreto para llegar a algo, ¿sabes? Yo espero que sí, que esa idea esté cambiando. A mí las mujeres inteligentes me parecen fascinantes y entiendo que mucha más gente lo debe pensar así (ríe).

La ficción se estrena simultáneamente en más de 240 países y territorios, ¿está preparada para la fama?Bueno, a ver, estoy concienciada de que puede ocurrir, pero tampoco estoy preocupada porque hay muchas cosas que te piensas que van a ocurrir y después nunca ocurren. Eso me ha pasado un montón de veces, que las expectativas no se cumplen. Así que estoy concienciada, pero también calmada, viendo qué pasa. Intento no anticiparme a las cosas.

Está claro que si la ficción tiene éxito vendrán más temporadas. ¿Le preocupa encadenarse a un personaje durante cuatro o cinco entregas?No, no me preocupa en absoluto porque creo que como actriz estoy en un abanico de registros bastante amplio. Quiero decir, habrá gente que solo me conozca por 'Reina Roja', pero ayer mismo, por ejemplo, estaba estrenando 'Reina Roja' y recogiendo un premio por 'Prima Facie'. Tengo un privilegio y una suerte en poder mostrar un abanico grande de personajes y en teatro, televisión y cine y todo eso hace que no te quedes anclada. Me quedaría anclada si durante cuatro años me prohibieran hacer un montón de cosas más, pero desde que rodé esto he seguido creciendo como actriz. Lo que estaría mal es si a partir de ahora solo hiciera de Antonia Scott durante diez años. En ese caso si te diría que me parece un desastre porque dejaría de crecer y aprender, pero mientras yo pueda ir mezclando los temas, los medios y los lugares en que contar historias, estoy muy contenta y muy tranquila.

Le iba a preguntar, precisamente, por 'Prima Facie'. ¿Qué ha supuesto en su trayectoria?Uf, muchísimas cosas. Para mí es un regalo, es de lo mejor que me ha pasado nunca profesionalmente. Creo que he tenido una suerte inmensa de que Juan Carlos Fisher pensara en mí y le viniera mi nombre a la cabeza para hacer esto, porque creo que no es fácil que lleguen a tu vida proyectos donde puedas expresar cosas artísticamente tan profundas y tan importantes a nivel personal. Yo te diría ha sido el reto más difícil de mi carrera y a la vez también el que me ha hecho casi más feliz.

Quienes la han podido ver dicen que se deja las tripas y las entrañas en cada representación. ¿Cómo se recupera una de algo así?Pues cada vez mejor. Los primeros días lo llevaba muy mal, pero ahora la verdad es que cada vez estoy más tranquila, cada vez puedo descansar más. Ya no estoy tan nerviosa así que me es más fácil enfrentarme a la función. Y así voy, con calma, comiendo bien, durmiendo bien, poco a poco.

"Tener una pasión y un sueño por el que luchar es bonito"

Curiosamente, y a pesar de que las propuestas son diametralmente opuestas, tanto Antonia como la abogada a la que da vida en el monólogo, son personajes atormentados. ¿Busca esos papeles o la encuentran?Es una mezcla entre que me vienen a buscar y que a mí también me gusta hacerlos. Estos dos personajes me los han ofrecido, pero pienso que seguramente a mí me ofrecen estos papeles porque me interesan más por este tipo de viaje, porque son personajes muy complejos y quizá acepto antes un personaje así que otro que tenga menos conflicto emocional. Simplemente porque como reto, como actriz quizás me interesa.

¿Desde cuándo tuvo claro que quería ser actriz?Pues creo que siempre. Mi madre me dice que nunca he querido ser otra cosa. Esa es una suerte que he tenido, que me ha acompañado toda la vida. Es una bendición haber nacido con una vocación, porque creo que hace que muchas otras cosas cobren sentido. Tener una pasión y un sueño por el que luchar es bonito.

Para dedicarse a esto, ¿hay que ser un poco inconsciente?No, yo creo que es todo lo contrario, creo que tienes que ser muy consciente de que es muy difícil y de que lo que se ve en las televisiones y en las redes sociales es solo la parte buena, que es un tanto por ciento, evidentemente, de los días, pero que hay muy poca gente que consigue vivir de esta profesión.

¿Cómo lleva esa otra parte de la profesión, la promoción?Pues bien, ahora estos días lo llevo bien. Me va un poco a épocas. Creo que depende también mucho de cómo esté yo, de cómo me encuentre personalmente. En este caso, pues siento que estoy en un momento de mi vida donde estoy muy feliz y muy tranquila y eso hace que las promociones y todo eso no me hagan perder el centro. Hay veces que cuando estás más inseguro o más vulnerable, te hacen perder un poco el centro.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión