Lola Rodríguez: "A 'La Veneno' le falló una sociedad que la maltrató y se rio de ella"

La actriz protagoniza la ficción 'Vestidas de azul' en Atresplayer, basada en el documental que narra la historia de seis personas trans en los 80.

La actriz canaria Lola Rodríguez, protagonista de ‘Vestidas de azul’.
La actriz canaria Lola Rodríguez, protagonista de ‘Vestidas de azul’.
Europa Press

Dos años después de la muerte de Cristina Rodríguez, 'La Veneno', Valeria Vegas vuelve a Valencia y se encuentra el VHS del documental 'Vestida de azul', una cinta real que narra las experiencias de seis personas trans en la España de principios de los años 80. Esas vivencias inspirarán su nuevo libro en el que, una vez más, decide contar la historia de unas mujeres que no merecen caer en el olvido. 

La actriz Lola Rodríguez (Las Palmas de Gran Canaria, 25 años) vuelve a meterse en la piel de la escritora tras el gran éxito de 'Veneno', la ficción que protagonizó para recordar y homenajear a una de las mujeres trans pioneras de la televisión. Disponible en Atresplayer, la plataforma de 'streaming' de Atresmedia, 'Vestidas de azul' completa su reparto con Paca La Piraña, Goya Toledo, Juani Ruiz, y Desirée Vogue, entre otras.

¿Conocía el documental de 'Vestidas de azul' antes de que le ofrecieran la serie?Lo conocía antes de empezar, obviamente. Es verdad que no lo vi entero hasta la serie 'Veneno'. Cuando conocí a Valeria Vegas hablamos del libro que escribió sobre ello, entonces ya me puse a verlo. Recuerdo que descubrí en mi adolescencia, a los 14 años, algunos fragmentos de este documental en YouTube. Me sorprendió muchísimo y me encantó a partes iguales, aunque no sabía muy bien qué es lo que era hasta que conocí a Valeria y pude ver el documental entero. Me quedé asombrada con todas las historias de estas mujeres de la década de los 80 y cómo en esa época podían vivir su vida siendo tan poderosas, estando tan orgullosas de sí mismas. Especialmente en una época en la que no había internet, ni asociaciones ni movimiento LGTBIQ+. Era lanzarse al vacío, a lo desconocido y eso es admirable.

Es importante recordar a las personas mayores y a las pioneras del colectivo. ¿Qué siente al escuchar sus historias?He sentido admiración y agradecimiento. Y, sobre todo, es un acto de justicia lo que estamos haciendo, porque hay muchas historias que se han quedado en el olvido; muchas mujeres que han puesto toda su vida, toda su fuerza y se han enfrentado a una sociedad que no las aceptaba y las dejó caer en el olvido. Es una forma de rescatar y de honrar a las que vinieron antes. Es importante que los jóvenes tengan referentes. Tenemos que saber de dónde venimos para entender dónde estamos. Esto es una cadena de amor y de ayuda. Mi colectivo siempre ha sido un refugio para poder ser una misma y para descubrir que no estás sola, que es lo más importante. Saber que lo que sientes y cómo te sientes es algo compartido, que hay una persona que te entiende, que te comprende y que te sostiene, eso es lo más bonito.

Con la perspectiva que da el tiempo, ¿cómo vivió el éxito de 'Veneno'? ¿Cree que la historia colocó a Cristina en el lugar que se merece?-'Veneno' demostró que no hay que enjuiciar a las personas, sino intentar entender, escuchar, hablar. Fue una mujer a la que la sociedad le había fallado; una sociedad que la había maltratado, había abusado y de la que encima se habían reído después. A las personas que sufren una discriminación, un abuso, sobre todo en este colectivo, hay que acogerlas y apoyarlas. Y es muy importante darnos cuenta que eso sigue pasando a día de hoy. Lo de 'Veneno' no fue hace tanto y se estaba todo el mundo riendo de ella. Hay que empatizar con las personas que quieren vivir otras vidas. 'Vestidas de azul' representa a una parte del colectivo, pero una parte bastante más privilegiada de la realidad.

'"Veneno' demostró que no hay que enjuiciar a las personas, sino intentar entender, escuchar, hablar"

"Fue una mujer a la que la sociedad le había fallado; una sociedad que la había maltratado, había abusado y de la que encima se habían reído después"

El desempleo en el colectivo trans sigue siendo muy alto. En este sentido, queda mucho por hacer.Queda mucho más. También es verdad que en la productora Suma Content y Atresmedia han impulsado el apoyo a las personas trans, trabajando tanto delante como detrás de la cámara, pero esto debería ser algo global y generalizado en toda la industria audiovisual. Obviamente la discriminación, las pocas ayudas sociales que hay ahora, las leyes LGTBI que se quieren quitar... todo eso influye en que las personas trans abandonen la escuela porque les hacen 'bullying' o dejen sus casas porque no las aceptan. Podríamos seguir infinitamente nombrando todos los abusos y todas las discriminaciones que sufre el colectivo, por eso es fundamental que hablemos de todos estos temas, que salgamos a la calle, que seamos visibles y que sobre todo impulsen proyectos de inclusión, que es lo que hay que hacer.

Ahora es muy conocida, pero no ha abandonado el activismo...Yo estoy aquí gracias al activismo también. Luchando por tener un futuro y para que otras personas no tengan que acudir a psiquiatras, ni psicólogos, ni gente que esté cuestionando todo el rato la identidad de las personas. No puedo mirar para otro lado.

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