Desarticulada en Zaragoza una organización criminal que favorecía la inmigración ilegal

Agentes de la Policía Nacional han desarticulado una organización criminal dedicada a favorecer la inmigración ilegal. Dieciséis personas, todas de nacionalidad china, han resultado detenidas. Tres de ellas son los principales cabecillas de la organización; las otras trece son solicitantes de asilo que habían obtenido la tarjeta de refugiado con un nombre falso.

Las investigaciones se iniciaron en el mes de marzo cuando llegaron a Zaragoza trece ciudadanos chinos que fueron acogidos en el albergue y refugio de Zaragoza. Este hecho, además de que las manifestaciones de todos ellos eran similares, como si estuvieran siguiendo un guión aprendido de memoria, llamó la atención de los trabajadores de esta institución, dada la escasa presencia de ciudadanos de esa nacionalidad habitualmente en el centro de acogida.Trece solicitudes de asilo por creencias religiosas

Los trece ciudadanos de origen chino, que en realidad habían llegado a España con un paquete de viaje como turistas, dinero en efectivo, pasaporte y visado, afirmaban haber huido de su país al verse perseguidos allí por sus creencias cristianas, y solicitaban el trámite de refugiados.

Las averiguaciones de la Policía han concluido que los tres principales detenidos eran los que habían escrito el "guión" y los que proporcionaban a sus compatriotas toda la información sobre cada uno de los movimientos que debían realizar para intentar conseguir la situación de asilados.

También eran ellos los que coaccionaban a sus compatriotas para que, a cambio de asesoramiento, les entregaran dinero. Se calcula que el beneficio total obtenido por los cabecillas se aproxima al millón de euros.

Los ciudadanos chinos eran hospedados en una finca, aislada, situada a las afueras de la localidad de Longares, donde aguardaban sin apenas salir a la calle a la espera de la obtención de la tarjeta de asilo que les permitiera residir en nuestro país.Argumentos falsos

Las pesquisas policiales permiten determinar que en las solicitudes de asilo los trece solicitantes aportaron una filiación falsa, y que en sus declaraciones posteriores también mintieron sobre circunstancias tan relevantes como el estar perseguidos en su país, carecer de medios económicos, lo penoso de la huida, afirmar que eran cristianos y haber entrado en España con un pasaporte falso facilitado por la organización.

Los tres cabecillas, en cambio, fueron detenidos por favorecimiento a la inmigración ilegal con ánimo de lucro.

En los diferentes registros practicados, se descubrió que guardaban sus pasaportes y billetes de avión en las maletas, así como importantes cantidades de dinero en yuanes y euros.

La investigación, que continúa abierta al objeto de averiguar si este grupo criminal asentado en nuestra ciudad pudiera tener conexiones con otros grupos de similares características en otros puntos de la geografía española, ha sido desarrollada por agentes de la Unidad Contra las Redes de Inmigración y Falsedades (UCRIF) de la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras.