políticas sociales
Los niños y jóvenes de Zaragoza y la adicción a internet: 6 horas al día pegados a la pantalla
El Ayuntamiento pondrá en marcha en mayo un servicio de asesoría y atención para padres e hijos que sufran esta problemática.
Más de seis horas delante de una pantalla pueden llegar a pasar los niños y jóvenes zaragozanos los fines de semana. Alrededor de un 70% prefieren utilizar internet o las redes sociales como forma de ocio antes incluso que salir con sus amigos o hacer deporte, y mucho más si se compara con otras aficiones que eran mucho más mayoritarias antes de la llegada de las nuevas tecnologías, como leer, pintar o tocar instrumentos musicales. Es un comportamiento cada vez más habitual y que puede derivar en conductas problemáticas de abuso e incluso, en los casos más extremos, en una adicción. Por eso, el Ayuntamiento de Zaragoza va a poner en marcha en mayo una asesoría específica.
Los datos se desprenden de un estudio elaborado entre octubre y noviembre del año pasado en el que han participado 1.129 personas residentes en la ciudad con edades comprendidas entre los 12 y los 25 años. Se ha entrevistado tanto a estudiantes de centros educativos, públicos y privados, como a población activa e inactiva mayor de edad. Siete de cada diez han asegurado que pasar tiempo en internet es su actividad mayoritaria, que hacen con una frecuencia de 5 a 7 días por semana.
Además, el 21% declara que les resultaría "muy complicado o imposible" reducir el tiempo que pasan frente a las pantallas. "La preocupación de las familias está claramente fundada. Vemos que tanto la infancia como la población joven está cada vez más desprotegida", ha declarado este miércoles la concejala de Políticas Sociales, Marian Orós, durante la presentación de unos datos que ha calificado de "preocupantes".
La investigación analiza también el papel que juegan las madres y padres en el comportamiento de sus hijos. Aunque se desprende que las relaciones entre unos y otros son "generalmente buenas" sí que se ha detectado una preocupante "indiferencia" por parte de algunos de ellos. Así, cuatro de cada diez progenitores no saben cómo van sus hijos en el colegio ni tampoco lo que hacen cuando utilizan el teléfono móvil o el ordenador. La mitad, además, no fijan normas claras sobre qué hacer en casa o fuera de ella.
"Esta hiperconexión sin control parental es en muchos casos un problema que afecta a la salud mental", ha alertado la edil, que ha estado acompañada de Irene Belloc, la directora del Centro Municipal de Atención y Prevención de las Adicciones (CMAPA), donde se llevarán a cabo las asesorías. Esta falta de límites se traduce, según Orós, en el número de horas que algunos de los encuestados pasan frente a las pantallas. De media, lo hacen 4,3 horas al día entre semana y 5,8 los fines de semana, mientras que la cifra sube en los días festivos a 6,7 horas si se analiza solo a los menores de edad.
En concreto, en lo que respecta a las redes sociales, la mayoría de los encuestados, casi el 80%, destaca no tener ningún limite o restricción por parte de sus padres a la hora de usarlas, y cerca del 60% las utilizan durante más de dos horas como forma de diversión. Hay además un 16% que confiesa pasar en Whatsapp, Instagram o TikTok, entre otras, seis horas cada día. También hay quienes las emplean, según esta encuesta, para sentirse mejor en momentos de tristeza o enfado o como forma de evadirse de sentimientos negativos, aunque en ambos casos de forma más minoritaria.
Un 20% ha sufrido 'ciberbullying'
Sobre todo es especialmente preocupante que un 20% se ha sentido acosado, amenazado o ha sufrido bullying por internet. Además, la percepción del riesgo del uso abusivo de la tecnología es, según ha señalado la edil, baja, ya que la mayoría considera que utilizar dos horas diarias estas tecnologías genera "pocos problemas o ninguno". Sin embargo, lo cierto es que puede llegar a tener consecuencias directas sobre el comportamiento y, tal y como ha alertado Belloc, convertirse en la puerta de entrada para otro tipo de conductas adictivas.
Por ejemplo, en este sentido del estudio se desprende también que la edad media a la que se juega con dinero por primera vez tanto 'online' como de forma presencial es de 12,8 años para los menores de edad. "No desconectar del móvil y las redes sociales y transferir el ocio únicamente a ese ámbito provoca ansiedad, sedentarismo y menor ejercicio físico", ha desgranado Orós. Además, la falta de control puede derivar en "conductas de riesgo", como el acceso a juegos de azar adictivos, contenidos inapropiados o situaciones de acoso.
Por eso, el Ayuntamiento va a poner en marcha, además de la asesoría, un programa de atención grupal a jóvenes con conductas de uso y abuso, a través del cual se pretende potenciar las habilidades sociales y el autocontrol. También se sustituirán las sanciones por botellón por este tipo de actividades y se pondrá en marcha una campaña de concienciación a través del servicio de Juventud.
