Urbanismo
La calle Burgos de Zaragoza: del estigma al renacer inmobiliario
Dos promociones de obra nueva dan un nuevo aspecto a una vía azotada por los clubes de alterne y la prostitución desde hace años.
No es nada fácil salir del hoyo. Pero que se lo digan a la calle Burgos de Zaragoza. Durante años estigmatizada por la presencia de clubes de alterne que atormentaban a los vecinos de la zona, el barrio vive una nueva oportunidad gracias al renacer inmobiliario. Dos promociones de obra nueva, una de ellas ya terminada, que suman 35 viviendas, devuelven la esperanza de que pronto queden lejos los prejuicios que pesan sobre esta parte de la ciudad.
Algunos recordarán cómo, hace más de 10 años, durante el verano las calles se llenaban de prostitutas. Había, al menos, diez chicas en apenas 50 metros. Ofrecían sus servicios de manera insistente, incomodando a los viandantes, que buscaban refugio en su hogar. Pero no lo encontraban, porque el jolgorio, los gritos y las broncas continuaban en la calle hasta altas horas de la noche. Esta era la realidad de las calles Burgos, Ávila, Escosura... Incluso, las mujeres se colaban en los portales "para hacer la faena", provocando problemas de insalubridad.
El problema venía de antes. Esta zona estaba declarada como saturada dada la gran cantidad de locales de alterne que la poblaban. Muchos de ellos fueron cerrados, pero no se solventó la situación, sino que la extendió a otras calles. "Estas vías (Escosura, Ávila, Burgos, Toledo...) siempre han estado algo degradadas y han tenido mala fama. Conozco gente que, incluso, procuraba dar un rodeo por García Sánchez o Bretón para no meterse por ellas. Después de algunos años con muchos locales vacíos y edificios necesitados de reforma, todos confiamos en que con estas promociones se dé una nueva oportunidad al barrio", comenta el vecino Daniel Gonzalvo.
Hace escasas semanas que un cartel de próxima construcción se exhibía en el número 12 de la calle Burgos. Viviendas Escosura, la promotora, derribará el edificio para levantar uno con 14 pisos que dará otra luz a la zona. De hecho, según fuentes de la inmobiliaria, la comercialización comenzó hace tan solo tres meses y ha tenido "una muy buena acogida". "Estamos muy contentos, con la idea incluso de subir los precios", comentan. Según se anuncia en Idealista, la casa más barata parte de 145.000 euros, mientras que los áticos alcanzan ya la cifra de 374.000 euros.
La compañía cuenta ya con licencia de demolición y construcción, y prevé tirar el viejo inmueble dentro de dos meses. Hasta entonces, desean seguir con el buen ritmo de ventas. De hecho, esta misma promotora terminó un edificio nuevo en la calle de Escosura, a la altura del número 7, en el año 2019, con 10 pisos. "La calle Burgos ya no era para nada lo que era antaño. Tuvo una acogida buenísima", añaden desde Viviendas Escosura. Al entorno le espera todavía un mejor futuro, pues los vecinos están pendientes de que se anuncie próximamente una reforma de la avenida Valencia y de que los suelos del Portillo salgan al fin del letargo para revitalizar todavía más esta parte de la ciudad con una enorme zona verde y más viviendas.
En cuanto a los pisos que Vivienda Escosura levantará, van desde los 50 metros cuadrados con un dormitorio hasta los de tres dormitorios y más de 90 metros cuadrados que ya superan los 250.000 euros. Unos buenos aislamientos y acabados es lo que la promotora busca construir.
El interés en estos edificios de nueva construcción, comentan los promotores, viene por dos vías: vecinos que quieren vivir muy cerquita del centro (la Puerta del Carmen está a 10 minutos andando) por un precio más económico; o personas jóvenes que ya residían en el entorno con sus padres y ahora quieren independizarse en la misma zona.
Precisamente, en septiembre del año pasado se inauguró otra promoción que ocupa un solar perteneciente tanto a la avenida Valencia como a la calle Burgos. Edificio Aurum, de Eizasa, que lleva la firma del arquitecto Lázaro Lahera, exhibe sus 21 pisos con una fachada para cada vía. Según fuentes de la inmobiliaria, la mitad de las viviendas ya han sido vendidas y hay "bastante interés" en visitar los que están libres. Por el momento, su coste va desde los 303.000 euros el más económico hasta los 400.000 euros de las partes más altas.
"Durante unos años parecía una zona un tanto estigmatizada, pero si te das cuenta está a dos minutos de la plaza de Roma y a otros tantos de la avenida Goya. El centro pilla también muy cerca y en cuanto se regenere toda el área del Portillo, donde está el Caixaforum, creo que será una zona idílica para vivir", comenta Yolanda Abril, también residente del área. Tras muchos años de problemas, los vecinos respiran más aliviados, conscientes de que todo el entorno contribuirá a una vida mejor.
