Los nuevos tranvías Urbos 100 circulan ya por Zaragoza y harán pruebas de noche hasta marzo
Uno de los dos tranvías que se incorporarán al servicio comercial de Zaragoza ha realizado sus primeros test en vía esta pasada noche sin pasajeros.
Los nuevos Urbos 100, llamados así por ser 100% accesibles, circularán en pruebas de noche por las calles de Zaragoza durante los meses de enero y febrero, según han confirmado este lunes desde Los Tranvías.
La primera toma de contacto se ha producido esta madrugada, cuando el convoy –que introduce pequeñas mejoras fruto de la evolución tecnológica– ha salido por primera vez de las cocheras de Valdespartera para recorrer los metros que las separan con el fin de línea, en la parada de Mago de Oz.
Las pruebas nocturnas se desarrollarán durante estas próximas semanas fuera del horario ordinario, aunque "no todos los días", según precisan desde Los Tranvías. Las próximas están previstas los días 10, 11 y 12 de 0.00 a 4.00 entre las paradas de Gran Vía y Plaza del Pilar– Murallas y a una velocidad normal.
Una vez acabada esta fase se harán las llamadas marchas en blanco. Es decir, test en tramos valle del horario comercial y sin pasajeros. La previsión es que los dos Urbos 100 estén operativos "en el primer cuatrimestre" de este año, aunque la fecha exacta dependerá de cómo vayan estos test.
Así son los tranvías Urbos 100 de Zaragoza
Los nuevos tranvías Urbos 100, adquiridos con fondos europeos Next Generation, cuentan con cinco módulos cada uno y tienen capacidad para desplazar hasta 194 pasajeros, con 46 asientos fijos y cuatro plazas para personas con necesidades especiales. Funcionarán como los actuales, con energía embarcada, capaz de operar en los tramos sin catenaria.
Además, incorporan novedades técnicas y una cabina con un nuevo diseño que le dota de mayor ergonomía y mejora la visibilidad del conductor. Se eliminan los escalones internos en la zona de asientos para mejorar la accesibilidad, se duplica el número de ventanas abatibles para favorecer la ventilación natural y se cambia la orientación de las validadoras para garantizar una mayor fluidez.
