accidentes de tráfico
Segundo atropello mortal en tres días en Zaragoza
Un hombre de 77 años ha fallecido este martes al ser arrollado por una motocicleta en el barrio de La Bombarda.
Las calles de Zaragoza han vuelto a cobrarse este martes la vida de otro peatón, un hombre de 77 de años al que ha arrollado una motocicleta cuando cruzaba Vía Hispanidad a la altura del número 142, en el barrio de La Bombarda. El trágico atropello se suma al que se registró el pasado domingo en el distrito de San José, donde un turismo embistió a mediodía a un matrimonio en un paso de cebra. La mujer, de 78 años, sufrió lesiones leves, pero su marido, de 82 años, ingresó en la uci del hospital Miguel Servet y murió al día siguiente. Con estos dos últimos siniestros, el balance anual de víctimas de tráfico de la capital se eleva a diez e iguala la cifra del nefasto 2022, que dejó el peor registro desde 2010 (entonces se registraron 14 fallecidos).
Según informaron fuentes de la Policía Local, el atropello se produjo sobre las 17.25 en uno de los tres carriles de Vía Hispanidad que discurren en sentido salida ciudad. En concreto, en el que obliga a los conductores a girar a la derecha para dirigirse hacia la avenida de Navarra o el Centro Comercial Augusta. Por causas que se desconocen y que ahora se investigan, por allí cruzaba, al parecer, de forma irregular, la víctima, identificada como A. H. G., que fue arrollada por la motocicleta que conducía un hombre de 36 años. El motorista no pudo esquivar al viandante y también terminó rodando por la calzada, pero afortunadamente resultó ileso.
El atropello se produjo apenas 15 metros después de un paso de cebra regulado por semáforo, por lo que al conductor de la motocicleta le habría resultado imposible prever la inesperada irrupción del peatón en el asfalto. Sobre todo, tratándose de una tramo con seis carriles centrales y dos laterales, lo que hace especialmente peligroso intentar cruzarlo fuera de los lugares habilitados para ello. En cualquier caso, serán los investigadores del equipo de Policía Judicial quienes tras valorar todas las pruebas –declaración del motorista, de la conductora del coche que iba detrás, mediciones y posibles grabaciones– depuren posibles responsabilidades.
Negativo en alcohol y drogas
Como es habitual en estos casos, el motorista se sometió a las pruebas reglamentarias de alcohol y drogas, en las que arrojó sendos resultados negativos. Al resultar ileso y no precisar de traslado a un centro hospitalario, los funcionarios pudieron interrogarle y hasta comentar in situ cómo fue la maniobra.
«La primera en llegar ha sido la Policía Local.Varios agentes se han puesto enseguida a hacer las maniobras de reanimación cardiopulmonar a la víctima. Se han estado dando el relevo hasta que ha llegado la ambulancia del 061», explicaba un hombre que se encontró con el accidente cuando salía de casa de su madre en la calle Biarritz. Pero ni los policías ni los sanitarios pudieron hacer nada por la víctima, que falleció prácticamente en el acto. El cadáver fue trasladado al Instituto de Medicina Legal de Aragón (IMLA), donde este miércoles se le practicará la autopsia.
De los diez accidentes mortales de tráfico registrados en lo que va de año en el casco urbano de Zaragoza, ocho han sido atropellos. Y llama la atención la avanzada edad de las víctimas, ya que la más joven tenía 67 años y el mayor, 85. La Policía Local recuerda que a lo largo del año se llevan a cabo numerosas campañas de concienciación y actividades para concienciar a las personas mayores sobre la necesidad de extremar la precaución a la hora de cruzar la calzada, incluso al hacerlo por pasos de cebra con prioridad.
Durante las últimas dos décadas, las iniciativas en materia de seguridad vial y el incremento de los controles de alcohol y drogas habían conseguido reducir de forma drástica la siniestralidad vial en el casco urbano de Zaragoza. Sobre todo, en lo que a accidentes con fallecidos se refiere. Tanto es así que desde 2010 el balance anual de víctimas no había superado nunca la cifra de ocho (2012).
El mejor registro se logró en 2021, cuando se alcanzó la cifra récord de un único fallecido. Sin embargo, al año siguiente fueron diez personas la que se dejaron la vida en el asfalto, lo que disparó todas las alarmas y obligó al Ayuntamiento a anunciar un plan de seguridad vial para la ciudad.
