Detenido por un robo con violencia en el Mercadona de la avenida de Navarra

El vigilante de seguridad del supermercado redujo al individuo, "muy agresivo" según testigos presenciales, que había hurtado productos de alto precio.

Supermercado Mercadona de la avenida de Navarra de Zaragoza
Supermercado Mercadona de la avenida de Navarra de Zaragoza
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Un hurto de productos de alimentación en un supermercado de Zaragoza acabó convertido en un robo con violencia que se saldó con la detención de un hombre de 47 años por la Policía Nacional.  

Tras darle el alto y ponerse "muy agresivo", según testigos presenciales, el vigilante de seguridad del supermercado redujo al individuo, que había hurtado productos de alto precio. A resultas del forcejeo para evitar que huyera, el vigilante sufrió diversas magulladuras y presentó un parte de lesiones. 

El suceso tuvo lugar  en el supermercado de Mercadona situado en la avenida de Navarra de la capital aragonesa, a las siete de la tarde del sábado, un momento en que numerosos clientes se encontraban en la tienda haciendo sus compras semanales. 

El individuo había pasado ya por caja y pagado algunos productos cuando el vigilante de seguridad, al darse cuenta de que llevaba un bulto voluminoso en el cuerpo, le dio el alto.  

Según ha relatado una persona que se encontraba en el supermercado y presenció los hechos, tras verse sorprendido, el hombre "se puso muy agresivo y amenazante e intentó agredir al vigilante en varias ocasiones". En el momento en que "trató de echarse la mano al bolsillo", el vigilante decidió actuar y reducirlo en el suelo hasta que llegó la Policía Nacional, que había sido avisada.  

"Opuso mucha resistencia", asegura el testigo, "fueron cinco minutos muy largos, angustiosos, hasta que llegaron los efectivos". A las 19.15 se procedía a su detención. 

En el registro efectuado, se le encontraron, ocultos en los pantalones, varios productos de alto precio como salmón ahumado, anchoas e ibéricos. Según testigos presenciales, también portaba en un bolsillo un objeto punzante, concretamente unas tijeras de electricista, aunque este extremo no ha sido confirmado por la Policía, que en este momento investiga este suceso.  

Lo que había comenzado como un hurto de productos por un valor de poco más de 100 euros, acabó convertido en robo con violencia por el enfrentamiento del individuo con el vigilante de seguridad, pues usó la violencia para tratar de escapar. El vigilante presentó un parte de lesiones, ya que sufrió magulladuras de consideración leve en las rodillas y un codo. 

El encarecimiento de los precios ha ido aparejado con el incremento de la frecuencia de los hurtos en los supermercados. El uso de la violencia es afortunadamente menos habitual. En ocasiones son productos para consumo propio, otras veces se hurtan artículos de mayor precio, como los sustraídos en esta ocasión, de entre 10 y 15 euros la pieza, para luego venderlos a mitad de precio en un parque, una plaza o un bar. 

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