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Desde relojes Casio hasta transistores: el último bazar de Zaragoza con productos para el hogar cumple 50 años
El ‘Supermercado del Hogar’, ubicado en la calle de San Miguel 45 de Zaragoza, cumple en abril medio siglo de vida: “Si llevamos 50 años aquí, algo bien haremos”.
Detrás del mostrador de este bazar, atendiendo a los clientes, encontramos a Pablo Corvinos, de 48 años, que regenta desde hace casi una década este negocio familiar de “venta de productos de toda la vida que se pueden necesitar en las casas”, dice este comerciante.
De la trastienda sale su padre, Antonio Corvinos, ya jubilado, quien lo puso en marcha en 1964, primero en la calle de Compromiso de Caspe de Zaragoza, y más tarde lo trasladó a su ubicación actual, en el número 45 de la calle de San Miguel. De eso hace ya 50 años. El próximo mes de abril, el ‘Supermercado del Hogar’, esta tienda de pequeños electrodomésticos y aparatos electrónicos cumple medio siglo. “Si llevamos 50 años aquí, algo bien haremos”, afirma Corvinos padre.
Este negocio es un bazar de los de toda la vida, de los que había antes de que llegasen los bazares de ‘Todo a un euro’ a los que ahora estamos acostumbrados. En él podemos encontrar todo tipo de pequeños electrodomésticos, batidoras, secadores de pelo, balanzas de cocina, planchas… También productos electrónicos como transistores. Esos con los que recordamos a nuestros abuelos con la oreja pegada al aparato, escuchando el fútbol o los informativos.
“Los transistores se siguen vendiendo muchísimo, sobre todo los compran personas mayores a las que les gusta escuchar la radio en este dispositivo”, explica Pablo Corvinos. “Este tipo de clientes no se llevará nunca un mp4 o un reloj digital, aunque también los vendemos. Esos los compran los más jóvenes”, matiza Corvinos.
Los relojes 'Casio', entre lo más vendido
Entre los artículos más vendidos, además de los transistores, están los productos de belleza para la mujer como máquinas depilatorias o planchas para el pelo. También para el hombre. De hecho las maquinillas de afeitar eléctrica son uno de los artículos más vendidos. “Es el producto estrella. Lo vendemos muchísimo”, asegura el comerciante. Pero también despertadores de los de toda la vida y relojes de pulsera digitales. “Los relojes 'Casio' y las radios 'Sanyo' son la base de cualquier bazar como el nuestro”, añade.
En el escaparate está la prueba y alberga varias decenas de relojes y transistores de este tipo, que ahora además, están de actualidad por la última canción que le dedica la cantante Shakira a su expareja, el jugador de fútbol Gerard Piqué. “La gente entra a por un reloj 'Casio' y nos hacen la broma con lo de Piqué, pero no hemos notado un aumento de la venta de estos relojes a raíz de esta polémica porque siempre se han vendido mucho”, zanja Corvinos hijo.
Cuando sí notan un pico en las ventas es si, por ejemplo, sale alguien famoso en televisión anunciando determinado producto. “Si Carlos Arguiñano anuncia en su programa un pequeño electrodoméstico en concreto, los días siguientes se vende muy bien, no la marca en concreto que anuncia, sino el aparato”, señala Antonio Corvinos.
Medio siglo detrás del mostrador
Con 73 años y la mirada puesta en el próximo aniversario de la tienda, este comerciante jubilado evoca el pasado, que le trae recuerdos de todo tipo. “He pasado momentos muy felices detrás de este mostrador y otros no tanto. Esta tienda ha sido mi vida y me siento orgulloso de que siga en manos de mi hijo, porque, además, lo hace mejor que yo”, señala Antonio.
En la actualidad, este bazar es la única tienda que queda de 12 establecimientos que llegaron a tener en los años 60 y 70 en la capital aragonesa. “Teníamos otros bazares, tiendas de grandes electrodomésticos, de venta al por mayor y de artículos de regalo por las mejores zonas de Zaragoza, desde la calle de San Miguel, donde teníamos dos, pasando por la calle del Carmen, de Alfonso I, Francisco Vitoria hasta en el barrio de Las Delicias”, recuerda el Corvinos padre.
“En aquella época vendíamos muchísimo unos motores de lavadora que se incrustaban en los antiguos lavaderos que se tenían en las casas junto a los fregaderos, facilitando el trabajo de lavar la ropa cuando la gente no disponía de lavadoras en sus casas”, rememora. “También se vendían muchos muebles para máquinas de coser y lámparas de techo de bronce, que estaban de moda”, añade el comerciante jubilado.
Con el paso de los años, estos productos dejaron de utilizarse y aparecieron nuevas demandas. “En los años 80 y 90 se vendían muchos relojes digitales, radiocasettes, transistores o despertadores con música”, recuerda. “Este tipo de productos todavía se sigue vendiendo y más baratos que entonces”, añade Antonio.
Con el cambio de milenio tuvieron que adaptarse a las nuevas tecnologías, adoptaron el pago con tarjeta y la compra a muchos de sus proveedores por Internet. Aseguran que, a pesar de las nuevas plataformas de venta online, “seguimos trabajando mucho y no nos han hecho daño porque nuestros clientes prefieren venir en persona a comprar a la tienda”, dice Pablo Corvinos.
“A la competencia, plataformas como Amazon les están destrozando. A nosotros no, porque somos distintos”, continúa el comerciante. “Nuestros clientes vienen aquí porque les aconsejamos personalmente, les informamos sobre los diferentes productos y nuestro trato con ellos en muy cercano”, añade su padre. “Además, la garantía del producto la llevamos nosotros y nos encargamos de su reparación en la tienda”, afirma.
“Por eso tenemos clientes de todas las partes de Zaragoza. Algunos vienen de propio desde Las Delicias o Torrero”, insiste Antonio. “Somos los únicos que quedamos en Zaragoza con una tienda de estas características y sobrevivimos por nuestra seriedad, el buen trato, la garantía y nuestros precios, que son muy ajustados”, concluye Corvinos padre.
