Imaginarium abre su segunda tienda en Zaragoza en menos de dos meses
El comercio, ubicado en la céntrica calle Sanclemente, se une al de León XIII. La empresa también tiene otra tienda en La Coruña y prevé llegar a las diez en España para finales de año.
Imaginarium quiere volver a generar ilusión entre los más pequeños de la casa. La cadena juguetera aragonesa, otrora imagen del triunfo y del buen hacer, ha pasado unos años complicados, tras un ERE que dejó en la calle a un centenar de trabajadores en agosto de 2019 y con el Fogasa haciéndose cargo de las indemnizaciones de estos y del otro centenar de empleados con contratos rescindidos desde enero de 2020. La empresa está ahora en manos del costarricense Federico Carrillo, su único accionista, que presentó a finales de junio un concurso voluntario de acreedores, y arrastra una deuda de 20 millones de euros. “De ellos, 10 millones corresponden a proveedores chinos y otros 10 a los bancos con los que ya en 2017 se firmó un acuerdo de reestructuración que cumplimos y pagamos, y ahora tocará de nuevo sentarse a negociar con ellos”, explicó entonces Carrillo.
Sin embargo, la juguetera vuelve a la carga con otro concepto: prescinde de los grandes establecimientos en centros comerciales, con sus horarios maratonianos, y quiere atender al público en tiendas a pie de calle, más pequeñas, con alquileres más baratos y un horario más flexible. En esas condiciones abrió hace poco más de un mes un comercio en la zaragozana calle de León XIII, y así va a abrir esta misma semana otro en la no menos céntrica Sanclemente. Contando el que también tienen en marcha en La Coruña, ya son tres los Imaginarium de esta nueva etapa, y si todo va como se espera, serán diez a finales de año en distintos puntos de España. “Pero todavía estamos trabajando en ello”, reconoce Nieves Herce, la directora comercial de la empresa.
Herce asegura que la clientela les ha recibido con los brazos abiertos, y que incluso el cierre de la tienda que tenían en el centro comercial Aragonia de la capital aragonesa dejó a “mucha gente” con la miel en los labios. “Nos preguntan cuándo vamos a volver a la zona de Romareda, dicen que nos echan de menos”, indica.
La idea de la empresa con la apertura de estos pequeños comercios es generar flujo de caja y dar salida a gran parte del 'stock' que quedó sin vender tras el cierre. Pero también incluyen novedades en el catálogo. Por ejemplo, muchos de los juguetes veraniegos, como hinchables para disfrutar en la playa o la piscina, se fabrican este año en las instalaciones de la empresa zaragozana Mypa, centrada en el desarrollo de proyectos de productos plásticos.
Imaginarium ha contratado a tres personas para atender los dos comercios de Zaragoza, dos de ellas a tiempo completo y una tercera a tiempo parcial que dará apoyo indistintamente a sus compañeros, explica Nieves Herce. Y la idea, remacha, es "seguir creciendo" para volver a llevar alegría y diversión que proporcionan sus juguetes al mayor número de hogares posible.
