La carretera A-2302, en el tramo que va desde la localidad de Santa Cruz de Grío hasta el acceso a la autovía A-2 en Morata de Jalón, vuelve a estar reabierta al tráfico. Lo está desde este domingo y con paso alternativo, tras 10 días de cierre total, según explican fuentes del Departamento de Vertebración del Territorio del Gobierno de Aragón. La clausura se llevó a cabo el pasado 9 de junio, una vez iniciada la campaña de la cereza, y la consejería advertía que estaría intransitable hasta el 30 de junio.

Sin embargo, las quejas de los alcaldes de la zona y de los fruticultores, que se veían obligados a dar un rodeo por la carretera que baja de la sierra hasta El Frasno, llevó a que la DGA, junto a la empresa Copha, del grupo MLN, acortase los plazos de intervención 12 días, con el objetivo de reducir las afecciones y dificultades a los vecinos del entorno.

Desde el Gobierno de Aragón, Bizén Fuster, director general de Carreteras, argumentaba que "es una obra que no se puede demorar más, por la seguridad del tráfico y de los operarios de la obra y por los riesgos que implica". Razona que "lo mejor es minimizar el perjuicio a 10 días, porque los técnicos desaconsejan que esperemos más. Puede haber lluvias y que sea peor".

Esta obra se realiza para estabilizar un talud que bordea un tramo de la A-2302 después de que el 30 de abril se produjera un deslizamiento de una ladera que invadió toda la calzada. Es el segundo incidente que se produce justo encima de la bocamina de la tuneladora para realzar el trasvase desde el río Jalón, en Embid de la Ribera, a la cola del futuro embalse de Mularroya, en término de Morata de Jalón.