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La jueza salda con multas la batalla campal con heridos en Boquiñeni

Una discusión a la puerta de un bar desencadenó un violento enfrentamiento en el que varios jóvenes resultaron lesionados y un coche acabó destrozado.

Imágenes de la crecida del Ebro, este lunes, en Novillas, Pradilla, Boquiñeni y Luceni.
Imagen de archivo de dos patrullas de la Guardia Civil.
Guillermo Mestre

Ninguno irá a prisión, pero a los tres jóvenes responsables de la batalla campal que se produjo la madrugada del 20 de septiembre de 2020 en Boquiñeni les tocará rascarse el bolsillo. Sobre todo a dos de ellos: Erick A. y Abel P., a los que además de por tres delitos leves de lesiones se les acaba de condenar por otro delito continuado de daños, ya que en un violento arrebato destrozaron un vehículo y lanzaron una tapa de alcantarilla contra la puerta de la casa en la que se había refugiado el grupo de amigos contra el que se enfrentaron.

La titular del Juzgado de lo Penal número 4 de Zaragoza considera probado que el detonante de aquella espiral de violencia fue el enfrentamiento que se produjo sobre las 4.30 a a las puertas del bar El Rincón de Boquiñeni. Allí, un joven identificado como Antonio José B. agredió a Erick A., causándole un corte sangrante en el labio. La víctima declaró en el juicio que no fue una pelea «cara a cara», ya que varios amigos del agresor también le pegaron. En cualquier caso, al único que ha condenado la jueza por este golpe es al citado Antonio José José B., al que impone una multa de 270 euros y una indemnización de otros 240.

Cuando se enteró de lo sucedido, la cuadrilla de Erick A. decidió cobrarse su particular revancha. Y lo cierto es que se presentó en la vivienda donde se habían refugiado Antonio José B. y sus amigos y les pidieron a gritos que salieran para «dar la cara»

Destrozaron un coche

Al ver que nadie abría la puerta ni    contestaba a su ‘invitación’, el joven lesionado, su colega Abel P. y otros amigos que no fueron identificados la emprendieron con el turismo de la marca Audi que había aparcado justo delante de la casa. Por lo visto, sabían que pertenecía a uno de los chavales que estaban dentro y decidieron destrozar el parabrisas, rayar la carrocería y pincharle las cuatro ruedas. El seguro indemnizó al dueño, pero los dos acusados tendrán que pagar una multa de 2.880 euros por el delito de daños.

Por los tres delitos leves de lesiones que también se les imputan, puesto que terminaron enfrentándose a los ocupantes de la vivienda, estos dos amigos han sido también condenados a una multa de 810 euros y una indemnización de 930 euros.

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