tormentas
Longares sufre el último coletazo del temporal de lluvia y granizo
Varios vecinos de la localidad del Campo de Cariñena han sufrido nuevas inundaciones y algunos árboles se han caído sobre mobiliario urbano de dos parques.
El episodio de fuertes tormentas que ha afectado a Aragón esta semana ha dado su último coletazo en el Campo de Cariñena. Sobre las 18.00, una fuerte tromba de agua y granizo acompañada por un vendaval se ha adueñado de la localidad de Longares durante apenas 10 minutos, pero causando daños en viviendas, mobiliario urbano. En la cercana Mezalocha se registraban 9 litros por metro cuadrado en una hora.
"Hoy era el día grande de las fiestas y habíamos preparado un acto puntual en la iglesia, únicamente con la música del dance pero sin paloteo. Al poco rato de abrir para que pasara la gente ha pasado todo", explica el alcalde Miguel Jaime. De hecho, se celebra un pequeño recital de jotas, cuyos intérpretes han visto "un manto blanco de granizo en la carretera".
Con las trombas de este miércoles todavía recientes, el saldo que deja es de más daños a los que ya se causaron en la jornada anterior. "Al estar todo tan tierno y tan empapado, el viento ha tumbado dos árboles, uno en el parque Grande y otro en el Lineal", detalla. Ambos ejemplares han caído sobre parte del mobiliario: un tobogán y una tapia.
"Han venido los bomberos para precintar posibles zonas peligrosas y hay vecinos que han vuelto a sufrir inundaciones y que ayer ya se quedaron incomunicados", recuerda. En el parte de ayer a los bomberos de la Diputación de Zaragoza llegaron los daños en varias casas. A eso se añaden, como en otras localidades, importantes daños en caminos agrícolas.
Otros árboles dentro del casco urbano permanecían inclinados y el agua dejaba inundadas algunas viñas. De igual forma, el barranco del Rudero bajó de nuevo casi colapsado por el agua, registrando un mayor caudal que el dado en junio, cuando el pedrisco también afectó a parte de la comarca Campo de Cariñena.
Inundaciones en las carreteras
La tromba de agua caída esta tarde en la zona ha anegado también varios tramos de carreteras, como la N-330, por donde se mantiene el tráfico desviado, de Botorrita a Longares, mientras se prolongan las obras en la A-23, en sentido a Teruel.
