Parque Venecia cumple diez años con el 80% de los pisos ejecutados y a la espera de más servicios en Zaragoza

El barrio más joven de la ciudad ha entregado 3.300 viviendas y mira al otro lado del Canal para su expansión. Los vecinos piden equipar los 26 solares públicos vacíos y acelerar los colegios.

El Ayuntamiento ha licitado la conexión peatonal de Parque Venecia con el Canal en dos puntos
El Ayuntamiento ha licitado la conexión peatonal de Parque Venecia con el Canal en dos puntos
Oliver Duch

El 30 de junio de 2011, una veintena de propietarios accedieron por primera vez al último barrio en nacer de Zaragoza. Una década después, Parque Venecia ya ha construido 3.300 viviendas de las 4.109 que contempla el sector, es decir, el 80%, y este verano se entregarán tres promociones más. Se calcula que su población supera los 7.000 residentes, la mayoría jóvenes con hijos pequeños, que se muestran "encantados" de vivir en un distrito que no ha dejado de crecer. Sin embargo, la falta de servicios sigue penalizando su día a día, en especial, en materia de educación, salud y alternativas de ocio.

Tras la entrega de la primera promoción de 142 viviendas, el ritmo de crecimiento del barrio ha sido "no brusco, pero continuo", apunta José Antonio Andrés, presidente de la asociación de vecinos y propietario de uno de aquellos pisos. Recuerda, eso sí, cómo la falta de servicios -no había tiendas, ni pasaba el cartero- generó un sentimiento de unión y comunidad entre los vecinos. "Nos ayudábamos todos", apunta.

Hoy la situación ha mejorado, pero siguen careciendo de equipamientos como biblioteca, centro cívico, instalaciones deportivas... Una de las principales luchas que mantienen los vecinos, dado el elevado número de niños, son las infraestructuras educativas. El barrio cuenta oficialmente con dos colegios, pero uno de ellos ni siquiera se ha comenzado a construir, por lo que los pequeños acuden cada día a barracones. "La DGA ha mostrado un compromiso con nosotros que luego no ejecuta. Entendemos las dificultades, pero deberíamos haber empezado el curso en un centro que todavía no tienen ni la primera piedra puesta", lamenta Noemí Corbatón, portavoz de la AMPA Claros del bosque.

En cambio, los padres de la zona celebran que el Ayuntamiento haya incluido en el presupuesto de este año una partida de 1,2 millones de euros para construir una escuela infantil municipal, pero piden que se ejecute con celeridad.

Por otro lado, la atención sanitaria tampoco es la idónea, aseguran. "Tenemos el centro de salud de La Paz, pero está saturado, nos dan cita para siete o incluso diez días", critica Andrés, que en cambio, reconoce que han mejorado otros aspectos de su día a día, como la movilidad. "El centro comercial -Puerto Venecia- debería tener otro acceso en la zona sur, hemos sufrido muchos atascos, aunque ahora ya no es lo de antes», relata.

El barrio también consiguió que la línea de bus 23 recorriera sus calles, y aunque todos los edificios cuentan con garaje, comienza a haber problemas de aparcamiento, por lo que los vecinos piden acondicionar de forma temporal alguno de los 26 solares municipales vacíos.

Líneas de alta tensión

Otra de las reivindicaciones históricas del distrito ha sido el soterramiento de las líneas de alta tensión, que estos meses acometen el Consistorio y Endesa. "Nos hemos volcado en solucionar los problemas que venía arrastrando el barrio y hemos dado atención a sus demandas", destaca el concejal de Urbanismo, Víctor Serrano, que recuerda que ya se han comenzado a impulsar los suelos cercanos al Canal Imperial y de expansión natural del barrio.

Por contra, la marcha atrás que dio el gobierno PP-Cs con el proyecto de trasladar el mercado provisional de Lanuza a Parque Venecia "fue una gran desilusión", afirma el presidente vecinal, que recuerda que "es una gran necesidad". A cambio, el Ayuntamiento ha promovido la instalación semanal de un mercadillo ambulante que ha sido bien recibido.

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